Si no fuera porque Mesa del Mar vigila el Teide desde su playa de arenas negras, se podría decir que el mismísimo Dios Vulcano arrojó desde lo alto de la gran montaña a los pies del mar a esta pequeña aldea pesquera. Pero no fue así. Claro que no. Mesa del Mar es una pequeña villa, antaño turística, que ahora recibe la visita de los afortunados residentes que pueden beneficiarse de una de las vistas más íntimas del norte de Tenerife. También algunos viajeros perdidos llegan a conocerla, aunque casi todos se han perdido, de camino a Valle de Guerra. ¿Quieres adentrarte en la pequeña y hermosa perla negra de Tenerife?
Mesa del Mar, el secreto del norte de Tenerife
Después de perderte ochocientas veces, llegarás a Mesa del Mar en un descenso de cientos de metros desde la localidad de Tacoronte. No te asustes si no lo encuentras a la primera. Hasta los propios tinerfeños que viven en el sur o en ciudades como Santa Cruz, se pierden la primera vez que descienden por esas carreteras sinuosas con unas maravillosas vistas. Si tienes vértigo, mejor que bajes a pie a lo largo de la carretera pero, ¡ojo! Nunca de noche.
Varias cosas te enamorarán de esta pequeña localidad. La primera de ellas, sus piscinas naturales junto a un pequeño malecón que, en un primer momento, parece que van a ser absorbidas por las olas que rompen frente a ellas. Nada más alejado de la realidad. Es común ver a algunos residentes bañándose durante los meses invernales. Y es que, amigos, Mesa del Mar tiene una temperatura templada de unos 20ºC durante casi todo el año, a pesar de que es una de las pocas zonas en las que los inviernos pueden ser algo nubosos, ¡e incluso con chubascos!
Te llamarán la atención, al instante, los apartamentos, anclados en los años 70, aunque lo realmente encantador y titánico será contemplar los impresionantes acantilados desde la playa de La Arena, una pequeña playa de arena negra que, en verano, cuenta con algún que otro chiringuito clandestino. Te gustará saber que el paseo marítimo te llevará a caminar más allá de la playa de arena negra pero, no solo eso, sino que si te diriges desde el aparcamiento de Mesa del Mar hacia las piscinas, advertirás que puedes seguir de camino a lo que parece un pequeño pueblo pesquero.
Es el pueblo de El Pris, un pueblecito que es famoso porque los tinerfeños dicen de él que es en donde mejor pescado se come de toda la isla. Habrá que comprobarlo, ¿no?
Información útil para disfrutar al 100% de Mesa del Mar
Los alquileres de vehículos son muy económicos en Tenerife, así que te los recomendamos porque, en caso contrario, te perderás lugares como este. ¿Alternativas? Las hay, pero no te van a gustar. Hay tan solo 8 guaguas diarias de Tacoronte a Mesa del Mar. Actualmente, no tendrás problemas en encontrar Mesa del Mar haciendo uso del GPS.
Ecoturismo en Mesa del Mar y alrededores:
- El pueblo pesquero de El Pris.
- Senderismo en los paseos de la Playa de La Arena, el acantilado y El Pris.
- Excursión a Valle de Guerra.
- Piscinas naturales en Mesa del Mar.
- Gastronomía de mar y guachinches.
Por cierto, si vas a Mesa del Mar durante unos días, te recomendamos que hagas una excursión hasta Valle de Guerra. De camino te encontrarás con algunos de los mejores guachinches (casas reconvertidas en restaurantes donde se come estupendamente y muy barato) de la zona.
En Tacoronte tienes todos los servicios, pero no en Mesa del Mar. En este pequeño pueblo hay tres bares-restaurantes y una tienda de ultramarinos a la vieja usanza que, aunque te puede sacar de un apuro, te costará el triple que en cualquiera de los supermercados de Tacoronte. De cualquier modo, merece la pena descubrir cada rincón de este bello paraje tinerfeño. Desde el paseo de Mesa del Mar al Pris, hasta las casitas abandonadas frente al mar te resultarán evocadoras. ¡Enjoy!
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Imágenes: mapio , Alex Bayorti , Francisco Garcia Ramón .