Por todos es sabido que Barcelona es el destino turístico por excelencia. Hablando tanto a nivel nacional como internacionalmente son numerosos los viajeros que año tras año eligen la Ciudad Condal, lo cual no es de extrañar teniendo en cuenta sus características.
Una de ellas guarda relación con la versatilidad. La capital de Cataluña acoge a toda clase de turistas con gustos muy diversos. Uno de los que más se han extendido en los últimos tiempos, en lo que se refiere al alojamiento, es el de preferir un alquiler vacacional en Barcelona.

Si bien es cierto que otras opciones siguen estando al pie del cañón, a lo largo del último lustro la alternativa recientemente mencionada ha adquirido una enorme popularidad. ¿A qué es debido?

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Muy buena relación calidad-precio

En plena era digital el nivel de competencia es más elevado que nunca. No solo nos referimos a la adquisición de productos, sino también a la contratación de servicios. Gracias a Internet, propietarios de toda clase de pisos pueden ponerlos en alquiler, aunque la oferta de viviendas es bastante amplia.

Ello da pie a que exista la posibilidad de encontrar muy buenos precios. El beneficio es para ambas partes, ya que primeramente el viajero obtiene un alquiler temporal en Barcelona asumiendo un coste que se queda por debajo de lo inicialmente planificado. Por su parte, el propietario se ve capaz de obtener liquidez en un tiempo récord, ya que la demanda también es elevada.

Precisamente al ser un alquiler de carácter temporal, nuevamente hay que hablar de un beneficio por los dos lados. El propietario del piso que pone en alquiler es capaz de cubrir huecos más allá de las semanas frecuentemente requeridas por los viajeros, especialmente en julio y agosto.

En lo que se refiere a los turistas, pueden alquilar días sueltos o una semana e incluso más, cuadrándolo a la perfección con las jornadas que tengan libres en sus respectivos puestos de trabajo.

Este tipo de claves han ido dando pie a que los alquileres vacacionales en la Ciudad Condal se popularicen al máximo entre los turistas españoles, europeos y del resto de continentes. Aunque la lista de motivos va más allá, ampliándose con factores tan importantes como los que seguidamente detallaremos.

Ubicaciones inmejorables

Antes hemos mencionado la relación calidad-precio y gran parte de ella pasa por disfrutar de un piso bien ubicado. En lo referente a Barcelona, por suerte es sencillo dar con un piso que, a pesar del óptimo emplazamiento del que hace gala, no acarrea un estratosférico desembolso, sino más bien todo lo contrario.

Un claro ejemplo es el de un apartamento en la zona de la Sagrada Familia que puede ser alquilado por tan solo 150 euros al día. Hablamos de una vivienda con setenta metros cuadrados y que ha sido renovado hace poco, otorgándoles a los inquilinos la confortabilidad que necesitan durante un mayor o menor período vacacional.

La comodidad no solo abarca lo bien acondicionado que esté el inmueble en sí. Adicionalmente también nos referimos a la céntrica ubicación, teniendo todo lo importante a escasos metros o kilómetros. En el primero de los casos se puede ir andando, apreciando el encanto que desprenden las calles barcelonesas. Si el monumento está algo más alejado, la conexión de metro es perfecta a todas horas.

Servicio profesional

A medida en que fue aumentando la demanda, la profesionalidad del servicio también se incrementó. Tanto es así que a fecha de hoy quedan cien por cien satisfechos no solamente los inquilinos, sino también los propietarios.

Estos últimos, al publicar su vivienda en un portal especializado, ven mejorada su calidad de vida gracias a la obtención de ingresos extra con los que antes no contaban. Por parte de los inquilinos, disponen de un servicio de atención que permanece activo durante las 24 horas del día y a lo largo de las siete jornadas de la semana.

Debido a todos los motivos que hemos reseñado no es de extrañar que los alquileres vacacionales en la urbe bañada por el Mediterráneo estén en pleno auge. Todo parece indicar que durante el transcurso del año 2021 alcanzarán unas cifras realmente buenas, sobre todo después de un año que a nivel turístico ha sido complicado para todos.