Si estás cansado de los destinos más típicos y quieres darle un plus de originalidad a tu próximo viaje, Rabat es una opción que debes tener en cuenta. Se trata de la capital de Marruecos, situada al norte del país y cercana a la mítica Casablanca, con una historia que bien merece la pena ser conocida. Y hoy, en El Viajero Feliz, estamos dispuestos a descubrir contigo parte de ella a lo largo de un recorrido por el itinerario sobre qué ver en Rabat.
En sus orígenes era llamada Chellah, y fue habitada por civilizaciones como los fenicios, los romanos y, posteriormente, por los bereberes. No sería hasta el año 1146 que se construiría una fortaleza llamada Ribat, que terminaría dándole el nombre por el que le conocemos actualmente. Además, ha estado bajo el protectorado francés durante algún tiempo, por lo que es fácil encontrar que sus gentes, además del árabe clásico y el berebere, controlan a la perfección el francés. ¿Nos acompañas a conocer qué ver en Rabat? Te aseguramos que te sorprenderá. 🙂
Índice de Contenido
Qué ver en Rabat: 10 Lugares que no puedes perderte
1. Torre Hasán
El primero de los lugares en nuestra recopilación sobre qué ver en Rabat es un auténtico símbolo de la ciudad: la Torre Hasán. Su historia se remonta al año 1195, cuando Yaqub al-Mansur pensó en la construcción de una gran ciudad con más de cuatrocientas hectáreas, la cual debía estar rodeada de imponentes murallas y fortificaciones. En en este lugar debía construirse una gran mezquita con cuatrocientas columnas, que superara a la Giralda de Sevilla y a la Kutubia de Marrakech. Sin embargo, las obras se detuvieron tras su muerte en 1199. De estas construcciones sólo queda la Torre Hasan.
Esta torre debía tener 86 metros de altura, pero debido a que no fue completada la obra, quedó con 44 metros. Esta torre ha pasado por mucho: desde el siglo XII, sobrevivió al Terremoto de Lisboa en 1755, siendo la única pieza de la obra inicial que quedó entera. A posteriori, los alrededores fueron restaurados y se construyó el Mausoleo de Mohamed V. Actualmente es un lugar muy visitado, gracias a su parecido con las famosa Mezquita de Sevilla, y por su imponente tamaño y belleza.
2. Kasbah de los Udayas
Dicen que la Kasbah de los Udayas es una ciudad dentro de otra ciudad, y la verdad es algo así. Es una fortificación o alcazaba de la ciudad de Rabat, situada cerca del río Bu Regreg. Fue construida como una fortificación militar para proteger a la ciudad de las posibles invasiones; y es que, ya se sabe, todos los lugares que están cerca de un río o del mar, siempre fueron blanco de invasiones por su ubicación estratégica para el comercio.
Su construcción original no se parece en nada a lo que podemos ver en la actualidad, ya que con el paso de los años su estructura se fue modificando para hacerla más fuerte y segura. Aquí se encuentra la mezquita Kasbah, la más antigua de Rabat, y las calles y casas de esta estructura parecen hacer quedado atrapadas en el tiempo, a diferencia del resto de la ciudad, destacando con sus colores y la sensación de paz que transmite. Por último, no podemos dejar de mencionar que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 2012.
3. Mausoleo de Mohamed V
El Mauseoleo es un sepulcro donde reposan los restos de tres de los miembros de la familia real marroquí. Este mausoleo sirve de tumba y también de mezquita, y fue construido entre 1961 y 1971. La idea de esta tumba fue de Hassam II, para su padre Mohamed V, quien es considerado el padre de la independencia de Marruecos. Durante el protectorado de Francia, Mohamed protegió a más de 400.000 judíos marroquíes, y se negó a aplicar las leyes antisemitas.
Por este motivo fue exiliado, pero el pueblo se sublevó y tuvieron que traerlo de vuelta a Marruecos, Francia negoció la independencia del país y, posteriormente, Mohammed se convirtió en monarca y fue muy apreciado por todos. Por este motivo, se escogió la planada al lado de la Torre Hasán para crear esta estructura de mármol blanco italiano.
4. Necrópolis de Chellah
Otro lugar increíble que ver en Rabat es la Necrópolis de Chellah. Es un antiguo complejo romano, que inicialmente era un puerto conocido como Sala Colonia, un lugar comercial que se situaba a la orilla del río Bou Regreg y cercano al océano Atlántico. Se cree que inicialmente este lugar fue ocupado por los fenicios, y luego por los romanos, quienes fueron sus últimos habitantes.
Una necrópolis es un cementerio, y fue utilizado para este fin por los benimerines. Se dice que este lugar después del terremoto quedó destruido, pero en lugar de dejarlo en ruinas fue restaurado y actualmente es sede de un Festival de Jazz, además de mostrar los vestigios de una civilización antigua.
5. Palacio Real de Rabat
Desde el reinado del sultán Mohammed III, los sultanes y reyes alauitas han mantenido un palacio en Rabat, aunque se dice que el Rey no vive aquí por motivos de seguridad. Este palacio se empezó a construir en 1864 sobre las ruinas de un antiguo palacio, frente a la plaza de Méchouar, y en su interior se encuentra una mezquita y varios edificios administrativos como la Corte Suprema del país.
En este palacio se suele recibir a los representantes diplomáticos de otros países. Una curiosidad, es que en este palacio cenaron Felipe y Leticia, los reyes de España. No se puede acceder a este lugar, porque la guardia de honor no lo permite, pero sin duda es un lugar qué ver en Rabat.
6. La Medina
La Medina es la parte antigua de la ciudad de Rabat, y fue declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco en el año 2012. Se puede acceder a esta parte de la ciudad desde la calle Souika. Quienes lo visitan tienen la oportunidad de recorrer sus calles sin el caos y la cantidad de gente que tienen otras partes más turísticas, y además se puede aprovechar para beber y comer algo en algunos de sus numerosos restaurantes y cafés.
Este lugar también alberga numerosas tiendas de artesanía típica marroquí. Por último, también mencionar que la Medina está rodeada por murallas de notoria antigüedad, sirviendo de muestra a la vida hace siglos en esta ciudad.
7. Mellah, el barrio judío
Mellah es el nombre con el que se conoce a los barrios judíos amurallados, existentes en algunas localidades de Marruecos. Se encuentra situada en el corazón de la Medina Fez el-Jdid, junto al Palacio Real. Antiguamente las comunidades judías vivían amuralladas aquí y cerca del sultán. Pero con el paso del tiempo, se fueron esparciendo por la ciudad.
Hoy en día el Mellah sigue mostrando parte de su esencia, con calles estrechas y encajonadas entre edificios que provocan un cierto sentimiento claustrofóbico para aquellos turistas que no están acostumbrados a esta gran autenticidad. Se puede visitar esta zona y ver los grandes contrastes de la vida y arquitectura judía, con respecto de los musulmanes. No puedes dejar de ir, ¡te encantará!
8. Mezquita El Quba
Otro de los lugares incluidos en nuestra lista sobre qué ver en Rabat es la Mezquita El Quba. Se encuentra justo en las afueras de Medina y es la primera mezquita islámica construida. Se dice que sus primeras piedras fueron colocadas por el profeta Mahoma cuando emigró de la ciudad de La Meca a la de Medina, y fue posteriormente completada por sus compañeros.
Es una mezquita muy especial precisamente por ello, y se cree además que aquí pasó Mahoma 20 días orando. La vieja mezquita fue demolida y sobre sus ruinas se construyó la mezquita que existe hoy en día en el siglo XX: un recinto con 6 entradas y un interior donde podemos encontrar un salón de oración, varios salones administrativos, algunas tiendas y una biblioteca.
9. Jardines Andaluces
Un tesoro en Rabat son los jardines andaluces, construidos entre 1915 y 1919 por los franceses, durante el protectorado al que estuvo sometido Marruecos. Eran los antiguos jardines del palacio. Como cualquier jardín el agua es un factor importante, por lo que al ingresar a ellos, veremos un estanque central y algunos otras fuentes.
Aunque se observan sistemas de riego más modernos como mangueras o aspersores, también se puede evidenciar algunos canales antiguos, que componían el sistema de riego para las muchas plantas de flores y frutas que componen este jardín. En el jardín podrás tener una sensación de paz y tranquilidad, muchos turistas descansando y apreciando la belleza del lugar. Es un tesoro qué ver en Rabat.
10. Avenida Mohamed V
En Rabat encontrarás mucha historia y lugares únicos, pero en la avenida Mohamed se representa la modernidad de la ciudad. Aquí encontrarás una gran variedad de locales donde podrás pasear por las vitrinas y encontrar todo lo que buscas. Además, encontrarás también una gran variedad de restaurantes, pasando de lo tradicional a lo occidental. Atrévete a recorrerla.
Esperamos que hayas disfrutado tanto como nosotros de nuestro recorrido por los grandes imprescindibles que ver en Rabat. Ahora, sólo debes agarrar tus maletas y visitar este lugar ubicado en el corazón de Marruecos y que representa la belleza de la historia y de la modernidad. ¿Qué te ha parecido este lugar?, ¿Te gustaría conocerlo? Cuéntanos que otro lugar quieres conocer y si te ha gustado este artículo. Nos gusta leerte.