Hoy en El Viajero Feliz daremos un paseo por una de las ciudades más importantes al norte de Italia, se trata de la capital de la majestuosa región de Piamonte: Turín. Una ciudad de contrastes, indudablemente, el lugar donde el legado medieval pervive junto al increíble desarrollo industrial, donde las personas viven la dolce vita y se dedican responsablemente a sus labores, todo un complejo urbano finamente adornado con los Alpes que le rodean. Una ciudad donde transitaron emperadores y nuevos reinos nacieron; por esto y mucho más es preciso dedicarle este artículo sobre qué ver en Turín.
Esta encantadora ciudad conjuga todo su rico legado histórico con una marcada vista hacia el futuro, cosa que le ha convertido en la capital del cine y del automóvil. Turín respira un aire marcadamente juvenil y testimonio de ello son sus numerosos bares y vinotecas que se esparcen por toda la ciudad, goza además de ser uno de los mejores productores de chocolate del mundo, incluso, según cuentan, los chocolateros suizos visitaban la ciudad para aprender las recetas y procedimientos para perfeccionar los suyos. Notarás que esta pequeña ciudad al pie de las montañas tiene muchísimo por ofrecer.
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Qué ver en Turín: 10 Lugares que no puedes perderte
1. Museo Egipcio de Turín
Y empezamos este recorrido sobre qué ver en Turín con uno de los más importantes museos de Italia, se trata del Museo Egipcio de Turín, el segundo museo egipcio más importante del mundo después del Museo Egipcio del Cairo. Este museo se ubica en el Palazzo dell’Accademia delle Scienze en el centro de la ciudad, muy cerca a la Plaza Castello, quizá la más importante de la ciudad; desde la plaza, el camino es guiado por estatuas egipcias que indican la dirección del museo, por lo que la llegada es muy sencilla.
El museo comprende una amplia cantidad de objetos del Antiguo Egipto, verán cerámicas, textiles, esculturas, sarcófagos e incluso varias momias reales. La visita a este museo está siempre marcada por una atmósfera mística y misteriosa, lo que genera mayor inmersión en la historia por parte del visitante; el museo se abre al espectador con dos salas dedicadas a la Época Predinástica y al Antiguo Reino, además cuenta con salas de exposiciones interactivas para que los más chicos aprendan mientras juegan. En el nivel más inferior se halla un templo egipcio real, la oportunidad perfecta para que todos aquellos que vieron la película de La Momia se sientan como verdaderos egiptólogos.
2. Mole Antonelliana
Seguramente cuando buscas fotografía de Turín, indudablemente aparece este impresionante edificio, el cual es símbolo de la ciudad y uno de los más importantes iconos arquitectónicos de Italia. La Mole Antonelliana fue concebida en inicio como una sinagoga, sin embargo fue adquirida por el ayuntamiento de Turín para convertirse en un monumento a la Unidad Nacional. Este edificio, que antaño fue el más alto de Europa, se ubica en el centro histórico de la ciudad, además es visible casi desde cualquier punto de la misma.
En la actualidad este monumento resguarda el Museo Nazionale del Cinema, la cual, por demás, es una visita muy atractiva. La mole Antonelliana debe su nombre al arquitecto que la proyectó: Alessandro Antonelli. Cuenta además con un maravilloso ascensor panorámico, en cuyo ascenso podrás contemplar las vistas más impresionantes de la ciudad y su conjunción con los Alpes. Sería un crimen perderse este sitio en tu visita a la ciudad y es evidente por qué fgura en este conteo sobre qué ver en Turín.
3. Palacio Real de Turín
Continuamos este recorrido sobre qué ver en Turín con una de las edificaciones más emblemáticas de la ciudad. Ubicada en la céntrica Piazza Castello, se erige el impresionante Palacio Real de Turín, edificación que antaño sería la residencia de los Saboya, pues la ciudad sería la capital de esta casa entre los siglos XII y XIX, cosa que nutrió enormemente a la ciudad tanto arquitectónicamente como históricamente.
La fachada de este palacio es de un corte barroco, aunque un tanto sobria, sin embargo es esta sólo el abrebocas de las riquezas que en su interior depara: Ingresar al palacio es dejarse consumir en el infinito artístico que rigió a la aristocracia en el pasado. Las paredes lucen ornadas con hermosos tapices de una amplia gama de artistas, hay jarrones de diversas dinastías orientales, impresionantes bajorrelieves y todo tipo de decoraciones en techos y paredes, sin mencionar la increíble armería que representa la conjunción perfecta entre arte e historia.
4. Museo Nacional del Cine de Turín
Llegó el momento de complacer a todos los cinéfilos que están leyendo este artículo sobre qué ver en Turín. Ubicado en el interior de la Mole Antonelliana yace resguardado el impresionante Museo Nacional del Cine, una institución que, como podrás deducir, está dedicada a la historia del cine incluyendo técnicas, directores, actores, productores, escenógrafos, guionistas y, en fin, muchos otros más; lo que le convierte en uno de los museos del cine más importantes en toda Italia.
El museo ofrece una amplia exhibición en donde se hallan múltiples pantallas que proyectan constantemente las más de 12.000 cintas que el museo tiene a su disposición. El objetivo del museo se centra en la difusión del material cinematográfico, además de fomentar el estudio del mismo; además de esto, en este museo se lleva a cabo anualmente en el mes de noviembre el importante Festival de Cine de Turín, uno de los más relevantes del cine independiente.
5. Palazzo Madama
Decir que el próximo destino en nuestro listado sobre qué ver en Turín es probablemente el más particular y pintoresco de toda la ciudad, no sería exagerar. En la importante Piazza Castello, a pocos metros del Palacio Real, se erige el curioso Palazzo Madama de Turín, un edificio que, en todo aspecto, podríamos decir que tiene dos rostros, cual si fuese Jano Bifronte. La primera fachada que se ve desde la plaza y la que da cara al Palacio Real es la de un elegante palacio palacio en piedra blanca, pero la que queda a su espalda es la de un imponente castillo medieval con torreones romanos.
El lugar donde se encuentra el palacio era antiguamente ocupado por una muralla romana que rodeaba a la Turín romana (Augusta Taurinorum), al ser ocupada por los Saboya muchos siglos después, estos la usaron para crear una fortificación, lo que daría por resultado el castillo medieval; sin embargo, por alguna razón, la misma familia decidió cambiar la estructura del castillo por el palacio barroco que se ubica al frente, pero por razones desconocidas este no pudo ser terminado, dejando como resultado las dos mitades tan contrastantes de la edificación. En la actualidad, en su interior se ubica el Museo Cívico de Arte Antiguo, además de ofrecer las atractivas visitas a través de la implacable fortaleza medieval.
6. Basílica de Superga
Es momento de alejarnos un poco del casco urbano para emprender un viaje por las colinas para llegar hasta la hermosa Basílica de Superga, una basílica que se halla en las cercanías de la ciudad y es visible casi desde cualquier punto de la misma. Este templo se erige en la cima de una de las colinas aledañas a Turín y representa un recorrido muy entretenido, pues, si el clima ayuda, el viaje es muy tranquilo a pie, los senderos que se dibujan son perfectos para contemplar la naturaleza y ni hablar de la hermosa vista de la ciudad una vez alcanzada la basílica, motivo que le ubica como imprescindible en este conteo sobre qué ver en Turín.
La basílica presenta una arquitectura propiamente clasicista con algunos toques del barroco, el cual estaba en auge al momento de su construcción en el siglo XVIII. Su construcción fue ordenada por Vittorio Amedeo II luego de superar un asedio Franco-Español, esto lo hizo para rendir homenaje a la Virgen María por apoyarle en su campaña militar. El interior de la basílica ofrece bellos ornamentos, aunque en general se mantiene muy sobrio, lo que es una oportunidad perfecta para relajarse luego del ascenso a la misma.
7. Parco del Valentino
Continuamos en este conteo sobre qué ver en Turín con el parque más conocido de la capital piamontesa, se trata del majestuoso Parco del Valentino, conocido también simplemente como el Valentino. Este se despliega por más de 123 acres por el costado izquierdo del apacible Río Po, es uno de los destinos predilectos por los nativos para pasear y relajarse, además cabe mencionar que el parque no es simplemente vegetación y rutas hídricas bellamente ornadas, la riqueza arquitectónica del lugar también sorprende.
Este parque cubre el impresionante Castillo del Valentino, la Universidad del Jardín Botánico de Turín e incluso cuenta con su propio burgo medieval. Este último fue construido para la Exposición Internacional de Turín en 1884 y es un conjunto arquitectónico que funciona a su vez como museo, en donde se expone el pasado de la ciudad piamontesa. Como verás, este parque tiene una enorme variedad de cosas por ofrecer. ¿Te lo vas a perder?
8. Catedral de Turín
Continuamos este conteo sobre qué ver en Turín con la impresionante catedral de Turín, la cual es la más importante iglesia católica de la ciudad, esta también es conocida como la Catedral Metropolitana de San Juan Bautista, pues está dedicada a él. La catedral posee un estilo renacentista, teniendo en la fachada acabados en mármol blanco y dentro de su estructura contempla tres naves, una cúpula octogonal así como diversas capillas anexas
Esta catedral es famosa por resguardar el Santo Sudario, la cual sería la tela con la que presuntamente fue envuelto Jesús tras ser bajado de la cruz. Este manto sagrado se ubica en la Capilla de la Sábana Santa, una de las que está anexas a la catedral. Quizá una de las vistas más impresionantes de la catedral, sea su maravillosa cúpula desde el interior: el trabajo arquitectónico y la modesta ornamentación la convierten en todo un espectáculo maravilloso.
9. Castillo de Venaria
En el noveno puesto de este conteo sobre qué ver en Turín llega el hermoso Castillo de Venaria, una impresionante edificación del más elevado estilo barroco que se erige en la Piazza della Repubblica. Este es castillo fue probablemente la más grande residencia saboyana, de hecho sus dimensiones son tan amplias que algunos lo comparan con el Palacio de Versalles, la particularidad con esto último (dato curioso) es que el Palacio de Versalles fue construido siguiendo el estilo del Castillo de Venaria.
El interior de esta majestuosa edificación es impresionante, fue construida en principio como base de caza y goza de hermosos ornamentos arquitectónicos como cornucopias de conchas y frutos expuestas en el estuco, las baldosas pentagonales de colores, además de estatuas y las más de 4000 pinturas. Los jardines por desgracia no se han conservado, pues fueron perdidos tras la invasión napoleónica, en donde estos fueron convertidos en armerías, sin embargo, hace varios años se está llevando a cabo un proyecto de recuperación ambiental que ha dado muy buenos frutos.
10. Piazza San Carlo
Cerramos este conteo sobre qué ver en Turín con una de las más importantes plazas de la ciudad. En el recorrido de la Via Roma se ubica la Piazza San Carlo, este recorrido la une con la Piazza Castello y la Piazza Carlo Felice. Este lugar es de los más icónicos de la ciudad, cuenta con una extensión de casi 13.000 metros cuadrados, lo que la hace lugar importante para diversos eventos.
Los nativos de la ciudad le otorgaron el apodo de «La sala de estar de Turín», por lo que siempre es posible ver personas sentadas en ella pasando el tiempo con la más suma tranquilidad. En el centro se erige el monumento ecuestre a Manuele Filiberto, además le rodean el Solaro del Borgo y la Iglesias de Santa Cristina y San Carlo. En esta plaza se llevan a cabo múltiples conciertos, eventos culturales y políticos, es punto central para manifestaciones y punto de llegada a protestas, además de ser el lugar donde se llevan las celebraciones por los triunfos deportivos del equipo de fútbol Juventus.
Así finalizamos nuestro recorrido sobre qué ver en Turin, esperamos que lo hayas disfrutado y no des más espera a tu visita. ¿Cómo te ha parecido el artículo? ¿Cuál fue tu lugar favorito? ¡Déjanos tu comentario!