Si algo hemos aprendido después de tantos viajes en El Viajero Feliz es que los recorridos de aventura son los que nos proporcionan los mejores recuerdos, las experiencias más inolvidables. El principal objetivo de viajar no sólo es conocer nuevos destinos, sino mimetizarse con su cultura y descubrir los contrastes de sus más hermosos paisajes. Marruecos es uno de esos destinos que se han convertido en una parada obligatoria, especialmente por el protagonismo que ha adquirido el desierto del Sahara. Recorrerlo (aunque sea una parte) es, de hecho, el sueño de muchos viajeros, y en la actualidad es una posibilidad factible para todos aquellos que anhelen visitarlo. ¿Quieres descubrir más acerca de esta maravilla y de cómo conocerlo? Acompáñanos. 🙂
La aventura de conocer el desierto de Marruecos
Marruecos es un destino de lujo y no porque sea excesivamente caro, sino porque te permite vivir una experiencia turística como ninguna otra. Debido a su elevado nivel de cultura y a su cercanía con el desierto del Sahara, Marruecos se ha convertido en uno de los principales destinos turísticos del mundo, siendo la ciudad imperial de Marrakech el punto de partida más famoso para conocer los principales desiertos marroquíes. Desde aquí nacen miles de alternativas, pudiéndose contratar una excursión al desierto desde Marrakech en Kolaboo y actividades turísticas que se ajustan a todas las necesidades.
Los dos desiertos marroquíes más importantes y de mayor fama son el desierto de Zagora y el de Merzouga. Aunque ambos pertenecen a la zona árida del Sahara, presentan características diferentes. Por ejemplo, el desierto de Zagora está más cerca de Marrakech y es un poco más árido, por lo que no tiene muchas dunas. Por otro lado, el desierto de Merzouga está un poco más lejos de la ciudad pero merece mucho la pena, es un escenario natural increíble y cuenta con dunas de hasta 150 metros de altura.
Respecto a los tours y excursiones en Marrakech, el desierto de Zagora puede ser ideal para una visita más rápida de una noche y dos días. Para el desierto de Merzouga, por otro lado, suele requerirse al menos tres días y dos noches, teniendo en cuenta el largo recorrido hasta él a través del Atlas y pudiendo parar en lugares tan interesantes como Ait Ben Haddou. Lo mejor es que, cuando organices tu itinerario para el viaje, pienses bien qué tiempo puedes y quieres dedicarle al desierto, consultando los distintos.
Conocer ambos desiertos es toda una experiencia y se puede hacer de diferentes formas, cada una con sus propias ventajas y desventajas. La decisión dependerá del tiempo que dispongas y también de tus gustos, aunque lo cierto es que muchos viajeros apuestan por la excursiones al desierto, porque los costes suelen ser bastante buenos… ¡Así que no te lo puedes perder! 🙂 Antes de despedirnos, te animaos a que nos dejes un comentario contándonos si has tenido la oportunidad de conocer el desierto y cómo viviste la experiencia o si tienes pensado próximamente visitarlo. ¡Nos encantará conocer tus vivencias!