¿Conoces alguna ciudad de Alemania? ¿Te gustaría visitar una de las ciudades que más han dado de que hablar aparte de su prestigiosa capital? Pues no te pierdas esta entrada de el Viajero Feliz en la que te descubrimos la ciudad de Gräfenhainichen. ¡Sigue leyendo!

La ciudad minera alemana

A las afueras de la ciudad de Gräfenhainichen, se ubica una mina antigua al aire libre ya abandonada, donde se encuentran grandes máquinas industriales que dejaron de funcionar hace mucho tiempo. Es lo que queda de la mina de Golpa Nord, que se cerró en los años 90 y en la actualidad está pasando por una nueva etapa, habiéndose convertido en un museo: un lugar denominado Ferrópolis, la ciudad de hierro.

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Estas grandes escavadoras y grúas, dejadas a merced del tiempo, llaman la atención por su enorme tamaño. Muchas de ellas alcanzan los 130 metros de largo y 30 de altura. Su trabajo durante décadas fue extraer millones de toneladas de lignito; en la actualidad, no obstante, su trabajo es el de funcionar como adorno de un paisaje post-apocalíptico, donde se llevan a cabo conciertos y festivales llenos de cultura.

El abandono de Golpa Nord

La historia de este lugar se remonta a los primeros años de la Alemania Oriental, cuando acabó la Segunda Guerra Mundial y empezó el saqueo sistemático de los recursos naturales del país para acrecentar la capacidad industrial. En su mayor éxito, la industria minera del país llegó a dar trabajo a unos 60.000 trabajadores para producir millones de toneladas de carbón anualmente, que se usó para dar energía a las centrales eléctricas.

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Aunque las cifras mencionadas anteriormente indiquen lo contrario, Golpa-Nord no fue la mina más grande del país y tampoco resultó ser eficiente. Por ello, después de la unificación del país en 1989, se puso fin a sus funciones. Las 5 máquinas que en la actualidad existen, resistieron al desguace cuando se pensó en construir Ferrópolis.

¿Y tú? ¿Conocías la existencia de este escenario? Si te ha gustado, te recomendamos que leas «Navidad de cuento: Alemania».

Imágenes: Krystian «Krane» SchneidewindFrank Schmidtke.