¿Quieres conocer un lugar mágico de Colombia? El Parque Nacional Natural Puracé se encuentra en la Reserva de la Biosfera del cinturón andino y está lleno de aguas termales, cascadas, lagunas y frailejones. ¿Quieres conocer esta belleza natural? ¡Aquí vamos!

Parque Nacional Natural Puracé, belleza sin igual

El parque forma parte de los departamentos del Cauca y del Huila. Comprende el majestuoso volcán Puracé, uno de los más activos de Colombia, además de diversos ecosistemas como la selva húmeda, páramo, súper paramo y nival.

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Por tener ecosistemas tan húmedos, el parque posee especies vegetales importantes que ayudan a las fuentes hídricas, como el musgo y el frailejón. Este último es de vital importancia para el país, ya que absorbe y retiene el agua del ambiente que luego será usada por la población. El frailejón crece un centímetro por año y cuidarlo es uno de los objetivos del parque, ¡verás muchísimos!

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Esta zona es de carácter volcánico y esto se refleja en las numerosas fuentes azufradas que posee. Las aguas termales de San Juan son un lugar especial para apreciarlas. El agua brota de la tierra de maneja misteriosa, en algunas partes fría, en otras tibia y en otras caliente, dejando que el azufre cambie los colores del musgo dándole una belleza increíble. Debido a su alto grado de acidez está prohibido tomar baños, además los gases son muy fuertes, pero basta con recorrerlas y apreciarlas para quedar relajado y de buen humor, ¡son increíbles!

Existe en este parque una actividad que solo podrás realizar aquí: el avistamiento del majestuoso cóndor de los Andes, el emblema nacional. Este hermoso animal es la única ave no marina de mayor envergadura del planeta, ¡tres metros! Posiblemente, tendrás que esperar un buen rato mientras se animan a ir por la carnada. Hay un macho y una hembra, pero valdrá la pena. Contemplarlos es todo un espectáculo.

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Puracé cuenta con bellas cascadas un poco escondidas. Entre ellas está la cascada del Bedón de unos diez metros de altura y la cascada de San Nicolás de 30, para la cual tendrás que dar una caminata cuesta arriba por un camino pantanoso en el que tienes posibilidad de perder un zapato. Pero, ¡no te preocupes, vale la pena! El paisaje y la brisa son increíbles y si llevas botas pantaneras irás aún más relajado.

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No te pierdas una visita al pozo de los deseos. El agua es prístina y está llena de vegetación, pero un consejo. No pidas un deseo tirando una moneda, esto contamina el agua y muchos animales viven de ella, así que hazlo mejor con una piedra pequeña ¡y no se lo cuentes a nadie!

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 ¿Te ha gustado el parque? Puedes llegar desde la ciudad de Popayán fácilmente. Por normas del parque, se debe viajar en compañía de un guía de la región, mira los beneficios, además de ir con alguien que conoce el lugar aprenderás mucho. Entonces, ¿te animas?

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Imágenes: Estefanía Bautista