Los viajes son una experiencia enriquecedora y muy personal, que aportan a la construcción de nuestra visión del mundo. Por ello, cada persona vive su propio viaje, de las formas y maneras que más lo identifican y nutren. Mientras para algunos las vacaciones ideales son en una tumbona frente al sol, escuchando las olas del mar y leyendo un buen libro, para otros, la actividad, el movimiento y el deporte son claves. Justo con base a esta premisa se ha desarrollado la tendencia del turismo deportivo.
Y es que son muchas las maneras de vivir el deporte, y también amplias sus variantes de aplicación. Desde las tradicionales actividades en las que ponemos el cuerpo y quemamos calorías, hasta deportes digitales, en los que son nuestras neuronas las que están al máximo, y en los que incluso podemos salir con un dinero extra. Es por ejemplo el caso de la web telecomasia, cuya popularidad en España está en franco crecimiento, dada su divertida variedad de opciones de juegos y apuestas, y las posibilidaddes de ganas dinero al final de cada partida.
En El Viajero Feliz nos hemos interesado en esta tendencia que viene ganando adeptos a escala mundial, y que especialmente en España está siendo muy bien recibida. Acompáñanos a conocer en qué consiste el turismo deportivo, sus características y disciplinas. ¡Empecemos!
¿Qué es el turismo deportivo?
Cuando hablamos del turismo deportivo nos referimos al acto de viajar a una ciudad, país o destino en concreto, con la intención de involucrarnos de manera directa o indirecta con algún evento deportivo. Muchos creen que se trata solo de la elección de destinos para hacer sky, kayak, rafting, trekking, running u otras actividades de este tipo.
Otros más, lo definen en base a aquellas personas que viajan para ir a ver una competición deportiva en particular. Pero lo cierto es que, aunque las incluye, el turismo deportivo no se circunscribe tan solo a estas áreas. De hecho, es bastante más amplio y abarcativo. Puede incluir viajar a ver una carrera de Fórmula Uno, conocer un destino excelente para trepar montañas, viajar con fines deportivos y educativos como hacer un profesorado de yoga, participar en una competencia de alguna disciplina, correr una maratón e incluso ser participante o espectador en competencias o juegos virtuales.
Al ser el mundo del deporte tan amplio, cualquier actividad que se le vincule, que nos interese, y gracias a la cual estemos escogiendo nuestro próximo destino vacacional, podría ser considerada como parte del turismo deportivo.
Características del turismo deportivo
- Una de las características fundamentales que definen la tendencia del turismo deportivo, es que puede ser activo o pasivo. El turismo deportivo activo es aquel en el que viajamos a participar de forma directa en una actividad. Puede ser una carrera, una competencia, un torneo de cualquier disciplina física o también virtual. Por su parte, el turismo pasivo se refiere a cuando viajamos para ir a ver algún espectáculo o evento deportivo en particular, como un partido de tenis o algún encuentro de fútbol.
- Cuando se trata del turismo deportivo pasivo, nos encontramos con eventos deportivos con una capacidad de movilización enorme a escala mundial. Por ejemplo, las personas que van a los partidos de la Copa Mundial de Fútbol o de los Juegos Olímpicos, estarían siendo partícipes de la tendencia del turismo deportivo.
- También se incluyen en la categoría de turismo deportivo las actividades que persiguen fines deportivos propios e incluso profesionales, como desarrollar un entrenamiento o sumar una habilidad deportiva.
¿Qué actividades incluye el turismo deportivo?
Cuando hablamos del turismo deportivo nos encontramos con una gama de actividades bastante amplia. Sea que hagas turismo pasivo o activo, en la categoría se incluyen deportes acuáticos como la natación, el surf, el remo, el kitesurf, el bodyboarding, la motonáutica, el qsquí acuático o el rafting. Se suman los deportes aéreos como el paracaidismo, el aeromodelismo, el vuelo sin motor, el parapente o el ala delta.
En el campo de los deportes de montaña pueden contarse el senderismo, la escalada, el montalismo, el ciclismo de montaña o el rápel. Y en lo relativo a los eportes clásicos, hay espacio para todos: fútbol, baloncesto, béisbol, tenis, hockey, boxeo, pádel, golf, entre otros.
Además de ello, en el turismo deportivo se incluyen las llamadas visitas nostálgicas a lugares de importancia histórica en el ámbito deportivo. Por ejemplo, el estadio olímpico en Grecia, o el museo en el mítico estadio Santiago Bernabéu.
¿Por qué ha crecido en España?
El turismo deportivo ha crecido en España de la mano del surgimiento de nuevos patrones culturales. Las personas y las familias en general no solo quieren aprovechar su tiempo al aire libre, sino que además hay mucha más conciencia sobre la importancia del deporte y de la actividad física en general para una buena calidad de vida. Con base en esto, este formato de turismo satisface varias necesidades. Por una parte, las personas salen de sus rutinas y conocen nuevos lugares, con el viaje cultural que ello implica. Por otra, se conectan con la energía del deporte, la pasión del fanatismo y las ventajas propias de la práctica para la salud.
En definitiva, el turismo deportivo es una tendencia que al parecer ha llegado para quedarse. Y tú, ¿Ya te has sumado a ella?