¿Estás pensando en qué plan viajero organizar para el próximo diciembre? Pues, si eres de esos trotamundos que deliran por el ambiente de playa, el alquiler de barcos con Charter en Menorca es uno de los planes que no pueden faltar en tu aventura. Pero la diversidad de planes menorquines divertidos se abren como un abanico de posibilidades en tus territorios.
5 planes para disfrutar de Menorca en diciembre
Pero no te preocupes, si lo tuyo es la tierra firme y la exploración, el alquiler de coche en Menorca con empresa local como Cochesmenorca te dará una libertad inigualable.Conoce más sobre Menorca y las posibilidades que te ofrece para pasar un diciembre inolvidable a continuación.
1. Recorre a tu ritmo el Camí de cavalls
Una de las mejores opciones para aprovechar de la belleza y los paisajes de Menorca, es lanzarte a recorrer el Camí de cavalls. Se trata de la mejor opción para dar la vuelta a la isla, apreciando sus vistas más lindas, playas, acantilados, roquedos y pinares. Esta ruta histórica se extiende a lo largo de 185 kilómetros, y se compone por veinte etapas muy bien señalizadas, que podrás hacer como prefieras. Si te anima este plan, ten en cuenta que es importante que lo organices con suficiente antelación. Deberás alquilar un coche y en la zona la oferta es limitada. Lo mejor es hacerlo con empresas locales como Cochesmenorca, que te garantizan el servicio de calidad que mereces.
2. Un día de navegación
Pocos planes son tan relajantes, divertidos y agradables como lanzarte a navegar en el mar Mediterráneo, disfrutando de los diferentes tonos azulados, la brisa marina y la libertad que solo el contacto con el mar puede dar. Si vas en plan romántico puedes alquilar un velero para tener una experiencia inolvidable. Y si tu viaje es con familia o un grupo de amigos, embarcaciones como los yates o lanchas pueden resultar las más convenientes. Si tienes licencia podrás tu mismo conducir el rumbo de la navegación. Y si ni es así, puedes alquilar la embarcación de tu preferencia con un Capitán que guíe tu viaje, haciendo las paradas que desees en las playas y rincones más paradisíacos.
3. Haz la ruta de los 7 faros
Menorca es sinónimo de playas inolvidables, en las que lanzarte a disfrutar del sol y luego hacer un buen chapuzón. Pero además de ello, toda la arquitectura de la isla es de tal belleza, que por si sola merece el viaje. Uno de los mejores planes para hacer en Menorca es la emblemática ruta de los 7 faros. Los faros de Menorca se alzan, imponentes, en diferentes puntos de la isla. Son quizás de los elementos que mejor la distinguen, y si viajas por primera vez nuestra recomendación es que no dejes pasar la oportunidad de tomarte una foto para el recuerdo en cada uno de ellos. Tendrás que dedicar parte del día para conocerlos todos. Acá te los mencionamos. Son el faro de Faváritx, el faro de Punta Nati, el faro de Sant Carlés, también llamado faro de Mahón; el faro de de l’Illa de l’Aire o de la Isla del Aire, el precioso faro de Cavallería, el faro Sa Farola y el faro Artrutx.
4. Explora los talayots de Menorca
Cuando hablamos de Menorca generalmente lo asociamos con costa, sol y diversión. Pero para los amantes de la historia, este es también un destino fenomenal, en el que se encuentran las únicas muestras existentes de la cultura talayótica. Si quieres hacer un verdadero viaje al pasado, no puedes dejar de visitar los populares talayots, también conocidos como taulas o navetas. Son un total de 1.600 construcciones megalíticas que datan aproximadamente del siglo IX a.C. Integrados con maestría al paisaje, estos monumentos prehistóricos te harán sentir que viajas en el tiempo. ¡No te los pierdas!
5. Conoce el Museo Militar de Menorca
Y siguiendo el mismo estilo histórico, hay otro lugar en Menorca que bien vale la pena recorrer, pues forma parte fundamental de la vida de la isla. Se trata del imponente Museo Militar. Esta fortaleza fue inaugurada como museo en el año 1981, y en sus salas se recoge parte de la historia de la población. Está ubicado en el cuartel de Calapor, en Castell. Entre los aspectos que más llaman la atención de los visitantes está el vetusto polvorín del siglo XVIII. También el edificio en si mismo tiene una historia del todo interesante. Primero funcionó como Hospital Militar. Luego cambió sus funciones para convertirse en Academia de Artillería y en el Regimiento de la Costa, hasta que llegó a su destino final de museo.
Todos estos son planes que, complementados con las playas, los bares y la gastronomía, convierten a Menorca en uno de esos destinos que se quedan grabados en el alma de todo el que los conoce.