Israel es un país soberano de Medio Oriente en el Mar Mediterráneo. Limita al norte con Líbano, al este con Siria y Jordania, Palestina y el mar muerto, al oeste con la Franja de Gaza, al suroeste con Egipto y al sur con el golfo de Áqaba, en el mar Rojo. También reconocida como Tierra Santa, por su enorme tradición bíblica, Israel reúne algunos de los lugares más importantes para judíos, cristianos y musulmanes. Seamos creyentes o no, la espiritualidad que vibra por sus ciudades es incomparable y no nos dejará indiferentes. En este artículo responderemos a tu pregunta sobre qué ver en Israel de la mano de las mejores fotografías.
Teniendo en cuenta que se trata de la región histórica donde aparecen por primera vez la agricultura, el pastoreo, la civilización y la escritura, podemos hablar de Israel como una de las «cunas de la humanidad». Muchas de sus principales atracciones han sido declaradas patrimonio universal por la Unesco. No debemos dejar que su extensión territorial nos engañe, puesto que se trata de uno de los destinos más cargados de opciones para viajeros en busca de novedades; desde los bosques de Galilea hasta el desierto de Negev, pasando por las aguas del mar Mediterráneo y haciendo parada para descansar y relajarse en las vibrantes playas de Tel Aviv. Y aquí les va una advertencia: hay cosas mágicas que solo pueden suceder en Israel. No te alarmes, que todas son experiencias maravillosas.
Acompáñanos en este recorrido turístico de la mano de El Viajero Feliz para mostrarte qué ver en Israel, con un listado de los 10 lugares que no puedes perderte.
Índice de Contenido
Qué ver en Israel: 10 Lugares que no puedes perderte
1. Masada
Masada es mayormente conocida como la fortaleza de la resistencia judía, construida por el rey Herodes en el año 30 a. C. Ubicada en una meseta elevada a 450 metros sobre el nivel del mar muerto y aislada por el desierto y los acantilados, este atractivo turístico reúne todas las características de un tesoro cultural. Es posible llegar por diferentes caminos que prometen recorridos extraordinarios y secretos históricos que difícilmente podamos develar sin estar presentes en estos sitios. Una de las opciones de ingreso es el llamado «Camino de la Serpiente» que discurre por una invaluable reserva natural. Una vez allí encontrarás castillos, fortalezas y restos arqueológicos que se mantienen intactos 2.000 años después de su construcción, así como la refrescante posibilidad de acceso a la cascada del oasis y al mar muerto. Sin dudas, un imperdible en tu viaje a Israel.
2. Museo de Israel
El museo de Israel es considerado uno de los principales museos de arte y arqueología del mundo. No podría ser de otra forma considerando la riqueza cultural de la Tierra Santa. El museo fue fundado de 1965. Desde entonces, obtiene la admiración de miles de turistas cada año. Sus interiores se encuentran colmados de piezas arqueológicas imprescindibles para la historia de la humanidad; tal es el caso de las colecciones enciclopédicas, famosos manuscritos encontrados en el mar muerto, obras de Bellas Artes, espectaculares muestras del desarrollo del alfabeto y otras impresionantes atracciones. Parada obligatoria para todos los amantes del arte y para aquellos curiosos que deseen hurgar un poco más en la historia.
3. Bahá’í Gardens
Otro alucinante atractivo para ver en Israel. Bahá’í Gardens es uno de los lugares más elegidos por turistas de todo el mundo. Ubicado en Haifa, la cuarta ciudad más grande de Israel, estos jardines descienden en cascada por el Monte Carmelo en una estructura de 19 terrazas que te quitarán el aliento con su belleza. Un paisaje casi surrealista que ni en tus más remotos sueños podrías encontrar. Bahá’í Gardens es el punto de encuentro de los seguidores de la fe Bahá’í, y su estructura tiene la finalidad de representar de manera visual los principios de esta fe: unicidad, unidad y diversidad de la humanidad. Plantas, flores, urnas, estatuas y otros elementos decorativos se encuentran perfectamente ubicados y combinados para crear una atmósfera armoniosa, con la intención de trasladar dicha armonía a tu interior. Un recorrido de paz e inspiración.
4. Ein Gedi
Cercano a las costas occidentales del mar muerto nos espera Ein Gedi, una reserva natural oriunda del desierto de Judea. Este fascinante edén natural fue descubierto por el ser humano, se estima, a la altura del período calcolítico, unos 4000 años a.C. Sus senderos te llevarán por una aventura donde no faltarán cascadas y oasis del desierto. Entre sus atractivos de carácter histórico se encuentran la Cueva del Dodim, o la Cueva de los Amantes, y la Cascada de David. Junto a una inmensa variedad de yacimientos arqueológicos podremos visitar también el interesante Templo Calcolítico y pueblos que datan del siglo 1 d.C. Como si esto fuera poco, para finalizar tu recorrido y poner a disfrutar el cuerpo, te proponemos visitar las aguas termales provenientes de un manantial de azufre, un elixir cuyas propiedades promueven la relajación, el bienestar y la salud. ¡Perfecto!
5. Yad Vashem
1 millón es el número de visitantes anueles que recibe esta institución estatal. Fue creado en 1953 con el objetivo de preservar el recuerdo de los judíos asesinados durante la Segunda Guerra Mundial, un genocidio que le costó la vida a más de seis millones de personas, principalmente en Europa. Nuestra presencia en Yad Vashem nos permitirá honrar la memoria y vivir en carne propia la importancia que radica en la verdadera garantía de los derechos humanos.
En este recorrido histórico encontraremos la reconstrucción de una parte del gueto de Varsovia, maquetas del campo de Auschwitz, fotografías de sobrevivientes tomadas durante la final liberación de los campos de concentración. No faltarán murales, películas y objetos de la época que harán de esta una verdadera experiencia.
6. Timna
Timna es una excelente opción como atractivo para ver en Israel. Se halla en el desierto del Negev, a 30 kilómetros del norte de Eliat. Sus minas de cobre fueron explotadas desde el VI milenio a.C hasta la Edad Media. Los antiguos egipcios utilizaban este metal para colaborar con las tribus de la región.
Se trata de una zona plenamente salpicada de restos arqueológicos y milenarios sitios de adoración que descansan entre montañas de granito y arenisca. Cerca, un lago franqueado por la mina de cobre más antigua del mundo. ¿Quieres más, viajero? Para coronar esta alucinante visita te recomendamos asistir a los paseos nocturnos que se realizan en el valle de Timna, donde los juegos de luces darán paso a una atmósfera cuasi onírica, capaz de satisfacer incluso a los más exigentes.
7. Cesarea Marítima
Cesarea es la ciudad fundada por Herodes I el Grande en el siglo I a.C. Se encuentra justo a orillas del Mediterráneo (lo cual nos segura una excelente vista) entre las localidades de Haifa y Tel Aviv. Su encanto radica en la conservación de ruinas históricas, en extremo singulares, que se despliegan a lo largo de la zona. Estos yacimientos arqueológicos son vitales para preservar la historia de Israel. En Cesarea Marítima encontrarás el teatro original de Herodes, el hipódromo, edificios bizantinos, las ruinas del castillo, el puerto antiguo y una pequeña plaza de artistas. Para una visita ecléctica que aúne pasado y presente puedes visitar las termas, realizar actividades de tiro al blanco, tai chi en la playa y búsquedas del tesoro. ¡Para todos los gustos!
8. Basílica de la Anunciación
Octava parada en nuestro recorrido por Tierra Santa. La Basílica de la Anunciación es un templo católico que se levanta sobre Nazaret, ciudad situada al norte de Israel. Es considerado el sitio donde Jesús pasó su infancia y adolescencia, afirmación que al instante despierta la curiosidad del viajero. A su vez, se lo conoce como el lugar de la Anunciación, donde el Ángel Gabriel le anuncia a María su maternidad.
La Basílica consta de una imponente estructura de dos pisos con una cúpula en forma de pirámide. Sus muros nos deleitarán con imágenes de vírgenes de todo el mundo y con las curiosas interpretaciones que cada cultura les atribuye. En el interior nos espera una reliquia de enorme valor religioso, la Gruta de la Anunciación. El destino perfecto para respirar un poco de historia bíblica y cultivar nuestra espiritualidad.
9. Yardenit
Uno de los lugares más enigmáticos para ver en Israel es el Yardenit, que se configura como el único lugar baustismal registrado para los peregrinos cristianos. Si bien algunos afirman que no es este el verdadero sitio en que Jesús fue bautizado, lo cierto es que engloba una experiencia única para todos los fieles de la religión. Se encuentra situado en el punto donde el Jordán sale del Mar de Galilea hacia el Mar Muerto. Miles de turistas eligen este destino para consumar su bautismo en el río y disfrutar de la naturaleza circundante. Puedes tú mismo ser bautizado o solo dedicarte a observar la maravillosa escena. Cuenta con sitios para rentar túnicas blancas y con restaurantes y bares que completarán tu visita.
10. Museo de Arte de Tel Aviv
Último paradero: el reluciente Museo de Arte de Tel Aviv. Nada más ni nada menos que el epicentro del arte moderno en Israel. Ubicado en el corazón de la ciudad, se nos presenta como una de las más populares atracciones para viajeros de toda índole. Podrás apreciar obras de artistas destacados tales como Soutine, Picasso, Miró, Lichtenstein, Munch o Kandinsky. Y si lo tuyo es la música, te contamos que el museo además cuenta con dos inmensos auditorios donde cada semana se ofrecen nuevos conciertos. Un paraíso cultural a tu disposición.
Vídeo: Qué ver en Israel
Esperamos haber resuelto tus dudas acerca de qué ver en Israel. Estamos seguros de que disfrutarás al máximo cada uno de estos lugares. ¡No olvides contarnos tu experiencia en la sección de comentarios! Y ahora sí… a preparar las maletas.