¿Piensas que existieron piratas en el Canal de la Mancha? ¿Te apetece descubrir una de las ciudades de la Bretaña oriental donde los piratas se movían como peces en el agua? Pues no te pierdas esta entrada de el Viajero Feliz en la que te enseñamos la ciudad de St. Malo. Una oportunidad de acercarte a una ciudad llena de historias y que, si te gustan los piratas, ¡sin duda debes conocer! ¿Nos acompañar en esta aventura? ¡Sigue leyendo!
ST Malo y sus piratas
St. Malo es una fortificación cuadrada de plata levantada frente a las costas de la Bretaña oriental, conectada con el continente por dos extensiones de tierra sobre las que se han construido vías de asfalto que han sido levantadas para cerrar el puerto. ¡Increíble!
Aunque en la actualidad es una ciudad desarrollada, limpia y con mucho turismo, hace unos tres siglos era uno de los lugares más empobrecidos de Francia. Sus habitantes sobrevivían de la pesca y cuando la pobreza los atosigaba del todo, emprendían la aventura de descubrir las costas frías de Canadá y del Cono Sur. Los menos cuidadosos empezaron su vida como piratas, encontrando siempre un lugar en este puerto. ¡No tenían otra opción!
Es interesante darse cuenta de que estos piratas, los delincuentes más temidos de su época, son en la actualidad, los héroes de esta ciudad. En el paseo de las murallas, por donde siempre corre el viento, se puede observar la estatua del más conocido de ellos: Surcouf, perteneciente a la estirpe de piratas y castigo de la marina mercante británica del siglo XVIII.
El paseo por las murallas es jalonado por montañas viejas de bolas de cañón, islotes cercanos y bastiones en los que se construyeron fortificaciones que se encuentran alrededor de la ciudadela. ¡Una verdadera maravilla! Dentro, las calles empedradas y estrechas están flanqueadas por edificios altos y tiendas de decoración y recuerdos, donde lo más vendido es el jersey tradicional de la ciudad, uno blanco con rayas horizontales azules, el uniforme oficial de pirata que todos sus habitantes visten en alguna ocasión. ¡Ya sabes! No puedes irte de St. Malo sin comprar un jersey pirata y comerte un delicioso plato de mejillones. ¡Prepara tu paladar!
¿Y tú? ¿Conocías esta ciudad portuaria de piratas? Si te ha parecido interesante, también puedes leer «7 maravillosos pueblos de la Bretaña francesa». ¿Qué pensabas de los piratas? ¿Qué piensas ahora? Compártelo con nosotros.
Imágenes: Poul-Werner Dam,