Pocos monumentos milenarios han llegado hasta nuestros días en tan excelente estado de conservación como las murallas de Ávila. Sobrias, imponentes pero bellísimas, estas murallas se encuentran entre las mejor conservadas del mundo ¡y puedes recorrerlas!
Si quieres hacer un maravilloso viaje al pasado y conocer algunas curiosidades de este fantástico recinto amurallado, síguenos.
La muralla en datos
Para hacerse a la idea de la importancia de esta muralla hay que recurrir a unos cuantos datos. Allá vamos. Tiene un perímetro de 2.516 metros, está jalonada por 87 torreones y tiene nueve puertas de acceso. Los muros tienen nada menos que 3 metros de grosor y 12 de alto ¿Quieres saber exactamente cuántas almenas tiene? Nada menos que 2.500.
Con semejantes dimensiones no es de extrañar que esta muralla aún siga imponiendo a quienes la contemplan y que la Unesco la declarara Patrimonio de la Humanidad, junto con el caso histórico de Ávila.
Algunas curiosidades
La muralla de Ávila es tan impresionante como lo fue su método constructivo. Impresionante…y a veces curioso y sorprendente. No hace falta mucho tiempo para darse cuenta de que los sillares que se utilizaron en su construcción tienen tamaños diferentes ¿Adivinas por qué? Son reutilizados.
Algunas son piedras de construcciones anteriores, incluso de la época romana. Y si sabes dónde fijarte o alguien te lo indica, verás que incluso utilizaron estelas y otros elementos funerarios de un antiguo cementerio.
Hemos hablado de los torreones. También tienen su peculiaridad, la mayoría son macizos. Sí, su interior está bien relleno de tierra o piedras.
Y ahora hablaremos de los supuestos directores de obra, un romano, Casandro, y un francés, Florín de Pituenga, que según la leyenda tardaron 9 años en finalizar las obras de la muralla. Aunque parece ser que es solo eso, una leyenda y que la construcción de la muralla llevó bastante más tiempo.
Un poco de historia
Ya conoces a los artífices de esta maravillosa obra arquitectónica. Ahora te contaremos algo de la historia (real) de las murallas. Comenzó su construcción en el año 1090 por orden de Alfonso VI de Castilla. Durante siglos sufrió ampliaciones y modificaciones de relativa importancia hasta que dejó de tener importancia.
Desaparecida la necesidad de defender la ciudad, la muralla pareció perder todo sentido. Hasta tal punto en que el siglo XIX se llegó a considerar su demolición para dar más espacio a la ciudad. Afortunadamente la falta de capital lo evitó y hoy podemos seguir contemplando este magnífico recinto amurallado.
Qué hacer en la muralla
Lo maravilloso de la muralla de Ávila es que no solo puedes verla, sino disfrutarla. Porque buena parte de ella se puede recorrer por su parte superior, por el adarve. Podrás contemplar unas magníficas vistas de la ciudad y de los alrededores y sentirte casi como un guerrero oteando el horizonte.
Existe la posibilidad de hacer visitas guiadas y teatralizadas. Estas últimas se organizan por la noche solo durante el verano, pero son muy divertidas, perfectas para disfrutarlas con los más pequeños.
¿Conocías la muralla de Ávila? Fantástica ¿No crees? Si te animas a visitarla y tienes tiempo, acércate a Salamanca, está muy cerca y podrás conocer otra maravillosa ciudad castellana.
Imágenes: jorcolma, katiebordner.