En lo más alto del Valle del Oja se alza un pequeño pueblo de encanto inigualable. Con sólo dos mil habitantes fijos, su atractivo es tal, que en verano puede llegar a reunir hasta quince mil personas. Hoy descubriremos qué ver en Ezcaray, un municipio nombrado como la primera villa turística de La Rioja. Apenas 143 kilómetros, elevados a 813 metros de altura, encierran la esencia de una villa mágica. Paisajes que quitan el aliento, gastronomía hecha para el disfrute, eventos y festivales a la orden del día y muchas disciplinas deportivas para practicar. Todo esto se conjuga en Ezcaray.
Al pasear por las calles de este pequeño pueblo español, respiramos el aire de las tradiciones de nuestros antepasados. El casco histórico conserva toda su belleza típica, por lo que es uno de los lugares más recorridos por los viajeros. El turismo toma protagonismo entre las actividades del pueblo, pues las bellezas naturales con las que cuenta este asentamiento, lo hacen un destino ideal para los viajeros amantes de la naturaleza. Otra importante actividad económica desarrollada en Ezcaray es la industria maderera. Encontramos acá una amplia fabricación de muebles, butacas, perchas y otros artículos hechos con madera de la zona. Acompáñanos en El Viajero Feliz a descubrir los lugares más extraordinarios qué ver en Ezcaray.
Índice de Contenido
Qué ver en Ezcaray: 10 Lugares que no puedes perderte
1. Valdezcaray
Si lo tuyo son los deportes extremos y el disfrute de la naturaleza en condiciones que te lleven al límite, Valdezcaray es tu mejor plan entre los lugares qué ver en Ezcaray. Es una estación perfecta para la práctica de esquí, con 24 pistas y dos itinerarios con un total de 22.935 kilómetros y una superficie esquiable de aproximadamente 300 hectáreas, en las que encontrarás recorridos con diferentes niveles de dificultad.
Seas principiante o todo un experto, en Valdezcaray encontrarás una pista adecuada a ti. Son en total 6 pistas de dificultad baja, otras tantas de dificultad media, 10 de alta, dos muy alta y dos catalogadas como itinerarios fuera de pista. En los itinerarios más complejos se pueden alcanzar los 2.125 metros de altitud y casi 600 metros de desnivel esquiable ininterrumpido. Un plan perfecto para los aventureros.
2. Ruta de los Siete Puentes
Si eres de los viajeros que disfruta la conexión con la naturaleza, respirar aire puro y tener contacto directo con arroyos y vegetación, no te puedes perder la Ruta de los Siete Puentes, uno de los mejores planes qué ver en Ezcaray. Recorriendo los senderos que bordean al arroyo Usaya, las montañas en pleno se abren para que los viajeros puedan recorrer sus caminos.
La Ruta de los Siete Puentes comienza en la aldea de Azarrulla. Atraviesa toda la extensión de Ezcaray y Valdezcaray. Deja a su izquierda la estación de esquí y continúa por la carretera. Las siguientes estaciones son el pueblo de Zaldierna y la aldea de Azarrulla, en la que encontramos el cierre del recorrido. En total, la ruta tiene unos 11 kilómetros, con suficientes señalizaciones para que puedas ubicarte en cualquier momento. Debe su nombre a que el viajero atraviesa a lo largo de todo el recorrido, siete puentes de madera.
3. Parroquia de Santa María la Mayor
Un aura misteriosa y un poco atemorizante es lo que se respira entre los muros de la Parroquia Santa María la Mayor. Es una voluminosa iglesia y fortaleza de origen románico, cuya construcción data del siglo XII. Sufrió también reconstrucciones durante los siglos XIV y XVI, que contribuyeron a configurar su estilo gótico. Su estructura de una sola nave de cuatro tramos, y capillas laterales, es típica de las construcciones de la Sierra de la Demanda riojana y burgalesa. Es una visita indispensable si vienes de visita a Ezcaray, pues el magnetismo que irradian sus muros te dará una experiencia que seguro no olvidarás.
4. Ermita de Santa Bárbara
5. Parque de Tenorio
El Parque de Tenorio es uno de los lugares más lindos qué ver en Ezcaray, sin necesidad de ir muy lejos. De hecho, muchas opciones de alojamiento se encuentran en sus alrededores. Es un espacio lleno de árboles y bancos para detenerse a descansar o a leer. De acuerdo a la época del año, el paisaje que nos ofrece será diferente. En invierno puede ser bastante gélido y con tonos azulados. En primavera y verano abundan los verdes de la vegetación. El otoño es quizás una de las mejores épocas para ver este parque en todo su esplendor. Las hojas caídas y los tonos naranja le dan un tono romántico y literario.
6. Ermita de Nuestra Señora de Allende
La Ermita Nuestra Señora de Allende es otra de las edificaciones religiosas que destacan en Ezcaray. Es una visita que no sólo satisface los intereses de quienes profesen esta religión. Todo el edificio es de un valor cultural e histórico muy trascendente, sin hablar de las vistas de desde su ubicación, pueden disfrutarse. Esta ligeramente apartada del centro del pueblo, pero se accede a ella a través de una tranquila caminata, cuyo sendero esta bordeado de diferentes tipos de árboles. Se accede a la edificación por unas largas escaleras, que llevan al viajero a lo alto de una pequeña colina. En su interior, la ermita resguarda la imagen de la Virgen de Allende. Es un lugar muy visitado por los creyentes, que aprovechan el altar para encender una velita y hacer sus oraciones.
7. Rutas Silvestres
Este plan no es más que la búsqueda de la perfecta armonía entre el viajero y la naturaleza. Ezcaray es un valle de ríos montañas y bosques, que nos devuelve al mismo corazón de la tierra. Al ser un poblado que sustenta buena parte de su economía en el turismo, están dadas todas las condiciones para que el senderismo sea protagonista entre las actividades ofertadas al viajero. Las sendas naturales son de las mejores cosas qué ver en Ezcaray, y seguro te harán albergar hermosos recuerdos. Hay múltiples empresas de turismo y guías particulares, que ofrecen todo lo necesario para que recorras con comodidad y seguridad los caminos de Ezcaray.
8. Sierra de la Demanda
Si eres de los viajeros que siempre salen con su cámara fotográfica colgada al cuello, estamos seguros de que la Sierra de la Demanda te dará unas cuantas postales para el recuerdo. Esta imponente Sierra pertenece a la Cordillera Ibérica, y resguarda todo el poblado de Ezcaray. Su majestuosa extensión ofrece espacios perfectos para los amantes de la naturaleza, las actividades al aire libre, y deportes como el senderismo o el ciclismo de montaña.
Una de las rutas más conocidas de la Sierra de la Demanda es la GR-93, conocida como Sierras de La Rioja. Tiene 164 kilómetros de longitud, que se dividen en 11 etapas. Esta ruta está planificada para hacerse a razón de una etapa por día, y atraviesa todas las sierras y valles del sur de La Rioja, pasando por 26 pueblos y todos los ríos importantes de la zona, entre los que destacan el río Najerilla y el río Oja.
9. Acebal del Valgañón
El Acebal de Valgañón debe su nombre a los abundantes y corpulentos acebos que dominan en todo el paisaje, algunos de ellos con varios siglos de antiguedad. Es un maravilloso espacio de bosque que destaca entre los lugares imprescindibles qué ver en Ezcaray. Unas cuatro horas son suficientes para hacer este paseo, internándonos en en la acebeda, que es de las mejor conservadas de la Península Ibérica. El bosque denso que observarás, además de un impactante paisaje, es el hogar de montones de especies de animales silvestres. Un hermoso paseo para hacer en tu visita a Ezcaray.
10. El Bosque Suena
Este espacio es verdaderamente un imperdible entre los lugares qué ver en Ezcaray. Sus espacios son muestra de la intervención humana en favor del medio ambiente. Un antiguo vertedero fue reconvertido en un bosque pleno de arte y abierto durante todo el año. La conjunción de voluntades de empresas privadas y sector público, dieron como resultado el Bosque Suena, un lugar en el que se presentan bandas musicales, y por cada banda que toca en el lugar, se planta un árbol. Éste es pintado con una obra de arte que represente la esencia de la banda en cuyo nombre fue sembrado. Totalmente original es este paseo que podés hacer en tu visita a Ezcaray.
Ezcaray es un maravilloso valle español, cuyas callecitas nos recuerdan lo más típico de nuestra historia. Sus iglesias mantienen un aura de misticismo que aún se siente, y sus encantos naturales lo hacen un destino con muchas opciones de disfrute. Los paisajes nos hacen conectar con ideas y frases de la naturaleza, que rememoran la posibilidad de sentir de cerca los senderos, los mil tonos de verdes, las aguas cristalinas de los arroyos. En pleno corazón de la Sierra de la Demanda riojana, este pequeño pueblo nos sorprende con la magia que sólo los entornos naturales pueden ofrecer. ¡Anímate a descubrirlo!