Palma figura como una localidad rica en cultura que esconde un sinfín de sitios interesantes. Quienes optan por esta zona suelen dar paseos a lo largo de la ciudad y disfrutar de momentos gratis en fondas y otros espacios idóneos para comer y conversar. Y, por ser un buen sitio para pasar las vacaciones de verano, siempre hará falta hacer una reservación anticipada en algunos de los inmuebles en Palma. Los destinos de esta zona son tan milenarios como extasiantes. La magia y la historia dicen presente en sitios como las casas centenarias de la parte central de la urbe. Y, para quienes disfrutan del arte y la arquitectura, dicho casco histórico también cuenta con una catedral con estilos góticos.
Una caminata por el puerto
Gracias a su cercanía al mar, los residentes de Palma tienen acceso a playas maravillosas. Pero esto no concluye aquí, ya que el puerto del lugar es uno de los enclaves más visitados. Dicho recorrido inicia en la catedral y se extiende durante un buen tramo. Una vez la caminata concluye, los turistas llegan a la zona histórica de la ciudad.
El trayecto en cuestión es de más de 3 kilómetros, pero debe tenerse en cuenta que el sendero está presidido por una línea ilimitada de locales, como centros nocturnos de baile, restaurantes, sitios con bebidas espirituosas y más. Quienes anhelan darse un chapuzón pueden optar por la línea de transporte de la ciudad. El trayecto marcado por cada unidad pasa por cada una de las mejores playas de la zona.
Playa y otros atractivos turísticos
La cultura de un enclave como Palma es tan mítica y especial que incentiva a todo el que la visita a formar parte de ella. En la playa de Palma, cuya extensión abarca todo el territorio dispuesto entre Can Pastilla y S´Arenal, los residentes organizan toda clase de fiestas, eventos y más, según la temporada. Toda la zona está repleta de sitios de hospedaje, discotecas, bares, fondas y otros sitios hechos para recibir a los visitantes.
Los que han visitado el lugar alegan que la mejor forma de aprovechar lo que Palma ofrece es elaborando un itinerario que no deje nada por fuera. Además, debe disponerse al menos de una semana para cumplir con todos los objetivos. El día está dispuesto para visitar el casco histórico, andar de local en local y admirar la magnificencia de la costa en verano.
Sucesivamente, cuando la noche cae, llega la hora de ponerse el traje y dirigirse a cualquiera de las discotecas del lugar. O, si algunos lo prefieren, las fiestas en la playa son, de cierta forma, eventos emblemáticos que dan un buen indicio acerca de cómo es la vida nocturna en una de las localidades más populares de España.