Todos los viajes acarrean gastos que pueden ser más o menos inesperados, un aumento de precio de un hotel, un cambio de pasajes de última hora o una excursión que no habíamos programado pueden sacudir nuestra cartera de improviso, y tenemos que estar preparados para ello. Pero hay algunas cosas que podemos planificar con antelación y que pueden ayudarnos a prevenir disgustos a la hora de viajar, evitándonos sobresaltos y protegiendo nuestro dinero.
¡Atención, viajeros! Estas son algunas de las compras que conviene hacer antes de embarcarse en un viaje.
Índice de Contenido
1. Tus medicamentos indispensables
No viajes sin tus medicamentos. Así de simple. Tanto si solo quieres pasar un fin de semana en el pueblo de tu abuela como si te quieres ir a Tombuctú para explorar la historia de África, tus medicinas deben ir contigo para evitar sustos. Ya se trate de antihistamínicos, antiinflamatorios, insulina o incluso un inhalador para el asma, debes asegurarte de que los llevas de antemano porque puede que no los encuentres en tu destino.
Seguramente los lugares a los que vas tienen todos los medicamentos que necesitas, pero es posible que no te los dispensen sin receta, que tengan carencia de alguno de ellos o que, simplemente, no consigas encontrar la farmacia local durante una emergencia. Recuerda que con la salud no se juega, así que, antes de subirte al tren o al avión, revisa tu mochila y comprueba que tus medicinas están ahí.
2. Adaptadores eléctricos
No los necesitarás si vas a moverte en países que comparten los mismos enchufes que España, pero sí que te harán falta para viajar a otros territorios. Los adaptadores de corriente suelen ser una de las cosas que más olvidamos a la hora de viajar, porque tendemos a asumir que todo el mundo usa los mismos que nosotros. Este no es el caso, así que, si te diriges a un destino internacional, asegúrate de prepararte en consecuencia. Puedes revisar el próximo folleto Carrefour 3×2 para conseguirlos en mayor cantidad y a mejor precio.
Y también hay algo que puedes llevar si vas a viajar dentro de España: una regleta. Te resultará muy útil si tienes que pasar muchas horas en un aeropuerto o una estación de tren, donde los enchufes suelen ser escasos. Incluso si encuentras un enchufe ocupado, una regleta te permitirá compartir la conexión y cargar tus dispositivos fácilmente.
3. Un kit de tarjetas SIM
Si viajas fuera de la Unión Europea, necesitarás una tarjeta SIM que te permita conectarte a internet de forma libre y mantenerte en contacto con los tuyos o consultar los mapas mientras te desplazas. Comprarla es sencillo, pero luego empiezan los problemas. ¿Cómo se abre la bandeja de la tarjeta SIM? ¿Qué hacer con la tarjeta SIM de España? ¿Qué ocurre si la tarjeta SIM que te han vendido no encaja en tu smartphone?
Un kit de tarjetas SIM es la solución a todo esto. Cuenta con una herramienta para abrir la bandeja de la SIM, una pequeña caja para guardar la SIM anterior, y diferentes adaptadores para ajustar tu nueva SIM a todos los tamaños. Vayas a donde vayas, este pequeño kit puede ayudarte a mantenerte online desde el primer minuto.
4. Un segundo smartphone
Nos guste o no, dependemos cada vez más de los smartphones, así que se hace necesario tener uno siempre a mano. Durante los viajes son frecuentes los hurtos, los accidentes o los despistes, y puede que te veas en una situación donde estés sin smartphone durante un tiempo. Por supuesto, puedes comprar uno en tu destino, pero será más caro y no tendrá ninguna de las apps esenciales que te hacen falta para capear el temporal.
Por eso te conviene prevenir y llevar un segundo teléfono desde casa. Guárdalo en la maleta o en un lugar distinto al de tu smartphone principal, y configúralo desde casa para que tenga todo lo que te hace falta: tus redes sociales, tu correo electrónico o tus apps de banca online. Si pierdes uno, el otro te servirá para continuar tu viaje y volver a casa sin problemas.
5. Divisas extranjeras
Comprar divisas exóticas como el chelín de Kenia o el rand de Sudáfrica puede ser bastante caro en los aeropuertos españoles, y lo más probable es que en tu destino te acepten los euros fácilmente y con mejor tasa de cambio. Pero no por esto debes correr el riesgo de volar sin llevar en el bolsillo una cierta cantidad de dinero en la divisa de tu destino.
Quizá llegues en un horario en el que las casas de cambio están cerradas. Quizá tengas que hacer un pago en la aduana, mucho antes de tener oportunidad de comprar divisas. Y, sobre todo, es importante que te familiarices con el aspecto de los billetes que usarás durante tu viaje, tanto para evitar estafas como para no pagar de forma errónea. Por eso, cambia siempre algo de dinero con anticipación, aunque cueste algo más caro.