Si hay un destino turístico y paradisíaco al que muchas veces hacemos referencia ese es Bora Bora. En cuanto pensamos en ese nombre nos vienen a la cabeza hoteles dentro del agua cristalina, buceo con especies animales exóticas y lugareños con estilo hawaiano, aunque obviamente sabemos que están a miles de kilómetros de distancia.
El Pacífico es ese océano grandioso donde de vez en cuando aparecen islas con una belleza digna de estar mejor ubicadas. Pero seguramente sea mejor así, ya que, como si nos hubieran puesto a prueba, hace falta recorrer miles de kilómetros donde solo vemos agua para llegar a un destino tan sobrecogedor. Y el esfuerzo merece la pena.
Bora Bora es una de esas islas. Forma parte de la Polinesia francesa y está situada al noroeste de Tahití, la capital de ese conjunto increíble de paraísos. Por ello, para poder llegar deberemos coger un vuelo hasta la isla principal y después embarcarnos en otro o montarnos en barco o helicóptero para llegar a Bora Bora. El transporte es opcional, pero obviamente hay unos más caros que otros.
Hoteles en el agua
Sí, la imagen que tenemos de Bora Bora es real. Tenemos la posibilidad de alojarnos en uno de estos hoteles construidos dentro del mar y dormir rodeados de agua. Es perfecto para relajarse, aunque no es lo único que podemos hacer.
En Bora Bora tenemos la posibilidad de realizar deportes acuáticos con acompañantes bastante difíciles de ver en otros sitios como rayas y tiburones. Además, también podemos realizar una excursión al Monte Pahia, de 600 metros de altura, o ir a la playa Punta Matira, uno de los sitios con las aguas más bonitas del mundo.
En resumen, lo mejor de Bora Bora es verlo con nuestros propios ojos ya que si es bonito observar solo las fotos, imaginaos lo que sería estar allí ahora mismo. Eso sí, se recomienda viajar de mayo a octubre ya que es la época donde no llueve. Y si os gustan las playas, aquí tenéis cinco más que también os harán soñar.
Imágenes: SF Brit, Alquiler de Coches, vgm8383, Javier Sánchez, Jürgen Lison