No todos los aeropuertos son iguales aunque su función sea la misma. ¿Sabías que Linchestein, San Marino, Vaticano, Mónaco y Andorra son los únicos 5 países que no disponen de aeropuerto internacional? ¿Sabías que el aeropuerto con más movimiento del mundo es el de Hartsfield-Jackson, en Atlanta, y que tiene una media de un vuelo cada 32 segundos? ¿Y que el aeropuerto de Valladolid inicialmente era de uso militar pero acabó siendo para civiles? Seguramente, cada aeropuerto posee alguna característica que lo hace especial, curioso o único, pero hay algunos que tienen alguna que realmente llama la atención.
Curiosidades sobre aeropuertos, ¿las conocías?
Estar tomando el sol o disfrutando de un apetitoso baño en la playa y que un avión pase a solo unos metros de tu cabeza puede ser tan peligroso como curioso. Esta situación se repite diariamente en la playa de Saint Martin, isla situada en el mar Caribe y a unos 240 kilómetros al este de la isla de Puerto Rico. La pista del aeropuerto internacional Princesa Juliana termina en la playa, por lo que los aviones sobrevuelan la zona a pocos metros del suelo.
Normalmente, los aeropuertos están a las afueras, pero en Gibraltar está en la misma ciudad y es el único atravesado por una avenida. En cambio, el aeropuerto internacional Mataveri, en la Isla de Pascua, utilizado solo por turistas que viajan a la isla para ver los sitios arqueológicos, se encuentra a 3759 kilómetros del aeropuerto de Santiago de Chile. Así que, si el de Gibraltar se considera el más próximo a una ciudad, el de la Isla de Pascua es el más remoto del mundo.
Aunque su uso es exclusivamente comercial, el aeropuerto de Bangda, en el Tíbet, se encuentra a 4334 metros sobre el nivel del mar, convirtiéndole en el más alto del mundo. Esta situación le obliga a tener una pista de 5500 metros porque, debido a la altura, el número tan bajo de moléculas de aire hace que el avión necesite una distancia mayor para poder despegar. En cambio, el aeropuerto de Amsterdam Schiphol, en Holanda, se encuentra a 3 metros por debajo del nivel del mar, siendo por esto el más bajo del mundo. Y el aeropuerto de la isla de Saba, Juancho E. Yrausquin, posee la pista más corta del mundo con solo 305 metros utilizables.
El aeropuerto de Courchevel, en los Alpes franceses, no es apto para aquellos que tengan miedo al despegue. Se encuentra a 2008 metros por encima del nivel del mar y la pista de aterrizaje tiene 525 metros de longitud pero su peculiaridad es que se adapta a la pendiente inclinada de la montaña.
Y, por último, el curioso aeropuerto flotante. En la bahía de Osaka, Japón, un puente de 3 kilómetros conecta la tierra peninsular con una isla artificial de 4 kilómetros de largo y 1 de ancho, donde está ubicado el aeropuerto internacional de Kansai.
¿Has conocido alguno de estos aeropuertos? Si no has tenido el privilegio de aterrizar o despegar en alguno de ellos, ahora hay incluso aplicaciones móviles que pueden llevarte hasta allí. ¿A qué esperas?
Fotografías: Mikel, Global Panorama, Enrique López, Pat Hawks, jamesjustin