Situada al oeste de Austria, en el valle del Eno y en medio de las hermosas e imponentes montañas de los Alpes, nos encontramos con Innsbruck, la capital del estado federado de Tirol que es reconocida, internacionalmente, por los practicantes de deportes de invierno y sus famosos paisajes de postal. Por ello, en El Viajero Feliz queremos compartir contigo una selección de lugares imprescindibles que ver en Innsbruck.
Su nombre significa literalmente “Puente sobre el Eno” (en alemán), y una de las imágenes más emblemáticas de la ciudad, es la de las pequeñas casas de colores que se perfilan en el borde derecho del río Eno, justo al frente de las inmensas cumbres alpinas. Es una ciudad que parece sacada de un cuento de hadas con un acervo natural, histórico y cultural, que resuena desde lo más profundo de sus montañas. ¿Estás listo para ponerte tu abrigo y acompañarnos a descubrir qué ver en Innsbruck? 🙂
Índice de Contenido
Qué ver en Innsbruck | 10 Lugares Imprescindibles
1. Castillo de Ambras
Construido por el Archiduque Fernando II, en el siglo XVI, el Castillo o Palacio de Ambras es considerado un tesoro de la arquitectura renacentista. Se halla ubicado a 600 metros de altura en las montañas de Innsbruck, y gracias a las valiosas colecciones de armas, arte y los valiosos y numerosos objetos que alberga, es considerado como uno de los museos más importantes del mundo. El palacio fue, además de museo, la residencia del Archiduque y su familia.
Con el paso de los años el castillo cayó en desuso, y gran parte de sus objetos y colecciones fueron trasladados a la Biblioteca Nacional de Austria, dado que, debido al deterioro y la mala conservación de la estructura, muchos de ellos comenzaron a perderse. Fue restaurado en el año 1950, y hoy en día exhibe piezas únicas en los más bellos e impresionantes salones de exposición que te puedas imaginar, entre los que destacan el Salón Español, La sala de Arte y Curiosidades, La Armería y el Castillo Alto. De los lugares que ver en Innsbruck, definitivamente el Castillo de Ambras es una joya arquitectónica y cultural que no te puedes perder.
2. El Techo Dorado
El Techo Dorado forma parte de la fachada de un edificio residencial que resalta, de forma evidente, respecto a los balcones de los edificios que lo circundan. Su construcción fue ordenada por el Archiduque Federico IV, a principios del siglo XV, para el uso residencial de los soberanos del Tirol. Se encuentra ubicada en el centro histórico de la ciudad, y en el puesto número dos de la lista de lugares imprescindibles que ver en Innsbruck.
Considerado como uno de los principales atractivos turísticos de Innsbruck, el lujoso techo es una combinación de estilos entre el barroco y el gótico. Está cubierto por 2.700 tejas de cobre, recubiertas a su vez por láminas de oro. Fue terminado en el siglo XVI, y su objeto principal era que el Emperador Maximiliano I junto a su esposa, tuviesen un lugar privilegiado para observar los festivales, torneos o cualquier otro evento que se realizara en la que, para ese entonces, era la Plazoleta Principal de Innsbruck; justo al frente del ostentoso y deslumbrante balcón.
3. Hofkirche
Hofkirche es un término alemán que significa “Iglesia de la Corte”, pero es conocido también como la “Iglesia de los Hombres Negros”, ya que 28 grandes figuras de bronce, que miden entre los 200 y 250 centímetros de altura, le hacen guardia permanente a un impresionante sarcófago. La iglesia fue construida en la Altdstadt, o “Ciudad Vieja” de Inssbruck por el emperador Fernando I, para honrar a su abuelo Maximiliano I en el año 1553, y es considerado el monumento funerario más importante del Tirol, así como el más sorprendente y curioso de toda Europa, por lo que se encuentra en el tercer lugar de nuestra lista de lugares imprescindibles que ver en Innsbruck.
Entre los gigantes de bronce se puede ver varias mujeres, entre las que destacan las dos esposas del Emperador, así como figuras de sus antepasados y héroes importantes de la época; pero lo más curioso de todo, es que Maximiliano manifestó en su testamento el deseo de ser enterrado en la capilla de San Jorge, ubicada en el Castillo de Wiener en la Neustadt o “Ciudad Nueva” de Innsbruck, por lo que el sarcófago del monumento se encuentra vacío.
4. Nordkette
Considerada la joya de los Alpes, la cordillera de Nordkette es el lugar ideal para los amantes de la naturaleza que habitan y visitan la ciudad de Innsbruck. Se encuentra dominando el lado norte de la ciudad, y su principal atractivo es que puedes llegar a él en tan solo 20 minutos gracias al Nordkettenbahnen, un futurista funicular que puedes tomar desde el mismo centro de la ciudad.
Desde Seegrube, la primera estación, ubicada a 2.000 metros de altura, se puede acceder al parque alpino Karwender. Aquí se ofrecen diversos planes de excursión y refugios alpinos, donde encontrarás un restaurante, un bar igloo, senderos que te llevarán a distintos miradores, e incluso, un sitio para pernoctar. Si deseas subir aún más, puedes tomar un segundo funicular que te llevará a la estación Hafelekar, 300 metros más arriba que la estación anterior. Aquí podrás contemplar, de un lado, una panorámica perfecta de la capital tirolesa, y del otro, una impresionante vista de los montes Karwendel que te dejarán sin aliento, por lo que Nordkette, más que un lugar imprescindible que ver en Innsbruck.
5. Hofburg
El Hofburg, o Palacio Imperial de Innsbruck, es uno de los principales atractivos de la capital tirolesa, y es también, junto su homínimo, el Hofburg de Viena y el Schönbrunn, también ubicado en Viena; uno de los tres monumentos históricos y culturales más importantes de toda Austria. El palacio, originalmente utilizado como edificio residencial de los Habsburgo, es hoy en día un museo de clase mundial. Después de un importante trabajo de restauración, el Palacio Imperial recuperó el esplendor que guardó durante el siglo XVIII, y es definitivamente un lugar imprescindible que ver en Innsbruck si se está de paseo por la ciudad.
Uno de los espacios más visitados y recomendados del Palacio, es el apartamento de la Emperatriz Elisabeth, que fue restaurado para lucir exactamente como lo hacía tres siglos atrás. En su interior podrás ver muebles originales del siglo XVIII, suntuosas tapicerías, y obras de arte que retratan, vívidamente, el esplendoroso estilo de vida de los burgueses de la época. El museo ofrece una perspectiva íntima del lujo y la extraordinaria riqueza en la que vivían inmersos los antiguos gobernantes de la nación austríaca.
6. Catedral de Santiago
La Catedral de Santiago, comúnmente llamada Catedral de Innsbruck, es una iglesia de estilo barroco del siglo XVIII construida en base a los diseños del arquitecto Johann Jakob, en el sitio de una iglesia romántica del siglo XII que fue destruida por un terremoto. Luego de su reconstrucción, fue sometida a una restauración importante después de los daños causados en la II Guerra Mundial.
La impresionante belleza de su exterior, inspiró a Alberto Durero a inmortalizarla en una de sus más famosas acuarelas; pero es en su interior donde se esconden sus más importantes tesoros. Los frescos barrocos de sus techos, que ilustran la vida del Apostol Santiago y fueron creados por Cosmas Damian Asam. En el ala izquierda de la construcción, el monumento fúnebre del archiduque Maximiliano III, junto a una célebre obra de bronce del año 1620 de Caspar Gras, pero sin duda, la más importante de todas sus joyas, es la imagen de María Hilf o “María del Socorro”, obra de Lukas Cranach el Viejo, que data del año 1530, y que es considerada la imagen mariana más importante de los Alpes, así como una de la más veneradas de toda la cristiandad; razón suficiente para darle un lugar en nuestra lista de lugares que ver en Innsbruck.
7. AlpineZoo Innsbruck
Más que un zoológico, el AlpineZoo es un santuario que alberga más de 2.000 animales de 150 especies diferentes en un área de 4,1 hectáreas. Está ubicado en los Alpes austríacos, específicamente en el Nordkette a 750 metros de altura, por lo que es el zoológico más alto de Europa, y cuyas espectaculares vistas nos permitirán sentirnos uno con la naturaleza salvaje del lugar.
Como muchas especies de animales alpinos se encuentran en peligro de extinción, el zoológico representa para ellos una especie de refugio que contribuye, de manera determinante e insistente, a la conservación de estas especies. El águila real, el oso pardo y el lobo alpino, estuvieron a punto de extinguirse en el siglo XIX, pero pudieron ser rescatados gracias a los programas de cría y reinserción al hábitat natural del zoológico alpino. Para llegar al zoológico se debe tomar un teleférico vanguardista reconocido internacionalmente, lo que lo convierte al AlpineZoo, en un paseo único y un lugar imprescindible que ver en Innsbruck.
8. Museo Estatal del Tirol
El museo Estatal de Tirol se fundó en el año 1823, y ofrece a sus visitantes la oportunidad de conocer colecciones muy completas sobre temáticas diversas como protohistoria, arte e historia del arte, cartografía, objetos arqueológicos y prehistóricos, vida cotidiana y mucho más. En 2003 el edificio fue renovado y ampliado, siguiendo el estilo de su arquitectura original.
Llamado también el “Ferdinandeum”, en honor al conde Fernando II de Tirol, el Museo Estatal de Tirol está comprendido por cinco colecciones en su sede principal que abarcan: la era prehistórica a través de la época romana y la Edad Media Temprana; historia del arte desde la era románica y gótica hasta la época moderna, una colección de instrumentos musicales del afamado lutier, Jakob Stainer, y una galería con obras de importantes artistas como Lucas Cranach el Viejo, Rembrandt, Joseph Anton Koch y Angelica Kauffmann. De nuestra lista de lugares imprescindibles que ver en Innsbruck, el Ferdinandeum es uno de los que contiene una mayor variedad de artículos del patrimonio histórico de Tirol, por lo que no puedes dejar de visitarlo si te encuentras de visita por la ciudad.
9. Arco del Triunfo
Ubicado al final de la calle María Thersien Strasse, en la entrada del centro antiguo de la ciudad, el Arco del Triunfo de Innsbruck se yergue, no para conmemorar un hecho relacionado con la victoria de una guerra (como es en la mayoría de los casos), sino con dos eventos que marcaron la vida de la emperatriz María Teresa, quien ordenara su construcción en el año 1765.
En la cara sur del monumento se pueden apreciar los motivos festivos originales de la obra, dedicados al enlace real de su hijo, el archiduque Leopoldo; mientras que, en la cara norte, el monumento se encuentra cubierto con motivos de duelo, en honor a su marido Francisco I, quien falleció repentinamente en medio de las celebraciones del enlace real. Es uno de los lugares de interés más importantes que ver en Innsbruck, y su belleza se debe al exquisito gusto de la emperatriz, quien eligió el estilo romano de la obra, así como las esculturas que lo coronan y los relieves de mármol que hoy son admirados por todos. Un testimonio histórico y profundamente humano que no puedes dejar admirar si te encuentras visitando la ciudad.
10. Hofgarten
Ubicado en la Ciudad Vieja de Innsbruck, el Hofgarten, o el “Jardín de la Corte”, es un parque protegido que colinda con el Hofburg, el Congreso y el Teatro Estatal de Tirol. Cubre un área de 10 hectáreas y fue establecido sobre la ribera del río Eno en el siglo XVI, bajo la dirección del archiduque Fernando II. Con el paso del tiempo se ha convertido en uno de los jardines más elaborados del norte de los Alpes. A lo largo de sus más de 600 años de historia, ha sido sujeto a varias reformas que lo llevaron de ser un jardín renacentista a ser un jardín formal francés, hasta convertirse en el jardín inglés que hoy podemos apreciar.
Gracias a sus lagos, un hermoso invernadero con una impresionante colección de más de 1.700 especies vegetales, su restaurante y sus juegos para niños, hoy en día es una importante zona de ocio para los habitantes de la ciudad. Durante el verano, suelen realizarse exposiciones temporales de artes y esculturas, así como torneos de ajedrez sobre tableros gigantes, y conciertos musicales el Pabellón de Arte de Tirol, que se encuentra en medio del parque y data del año 1733. Vale la pena destacar que algunas de las plantas que hoy podemos ver, fueron sembradas personalmente por la emperatriz María Teresa, la misma responsable del Arco del Triunfo de Innsbruck.
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Dando por terminada tanto nuestra selección sobre qué ver en Innsbruck como nuestras sugerencias, te animamos a que nos dejes un comentario contándonos tus impresiones. Las capitales de los Alpes nos encantan porque en los meses de invierno son ideales para esquiar y en verano suelen ser una alternativa al clásico plan de sol y playa.
¿Cuál de nuestros lugares que ver en Innsbruck te ha llamado más la atención? ¿Has tenido la oportunidad de conocer Innsbruck o de viajar por Austria? Si es así, ¿quieres recomendarnos más imprescindibles que ver en Innsbruck? ¡Te leeremos con sumo interés! 🙂