Sigue con nosotros los pasos de Marco Polo para conocer una mítica etapa de la Ruta de la Seda que ha sido denominada por la UNESCO como «Encrucijada de Culturas«. Lo cierto es que no hay apelativo que la defina mejor, pues aquí han confluido desde el inicio de los tiempos todas las culturas del mundo antiguo. Árabes, turcos, persas y mongoles, todos coincidieron en esta ciudad que en la actualidad es parte de Uzbekistán, Unión Soviética.
Samarcanda en cinco etapas
Plaza de Regestán
Seguramente, esta es la cara más popular de Samarcanda pues aquí se sitúan tres de los edificios más emblemáticos de toda la ciudad que, al mismo tiempo, han servido como modelo para determinar las bases de toda la arquitectura islámica entre el mediterráneo y el subcontinente indio.
Madraza Ulugh Beg
Nada más entrar en la plaza encontraremos tres madrazas una al frente y dos laterales. Nosotros entraremos, primero, en la del lateral izquierdo que es la Madraza Ulugh Beg. Las escenas astronómicas representadas en los bellos mosaicos que la decoran indican, de algún modo, la finalidad del templo que, desde un principio, fue una especie de «Universidad de Ciencia y Astronomía» visitada por los mejores científicos y estudiosos de la época. En su interior, podemos ver estatuas que representan algunas de aquellas escenas.
Madraza Sherdar
De frente a la anterior, dando simetría a la plaza, entramos ahora en la Madraza Sherdar que data del s. XVII. En su interior se conservan los restos de un santo islámico Imam Muhammad ibn Djafar. Es muy similar a la anterior, solo que esta tiene una preciosa cúpula decorada por mosaicos azules en su lateral derecho y los leones o tigres dorados que coronan la entrada. ¡Fantástica!
Madraza Tilla-Kari
Antes de abandonar la plaza, entraremos en la Madraza Tilla-Kari la más grande de las tres que preside la plaza en su interior. Esta esconde una preciosa Mezquita y un patio todo decorado de azulejos dorados.
Mezquita Bibi Khanum
Fuera ya de la plaza, prosigue nuestra visita a esta ciudad que parece sacada de los cuentos de Aladino, para visitar la Mezquita de Bibi Khanum que cuenta la leyenda de que no pudo ser completada porque el arquitecto se enamoró perdidamente de la esposa del gran Tamerland, siendo perseguido por este motivo hasta que lo encontraron muerto.
Necrópolis Shah-i-Zinda
Aunque no lo parezca, por sus llamativos colores dentro de la gama de los azules, estamos dentro de un cementerio. La Necrópolis de Sha-i-Zinda se creó en torno al mausoleo de Qusam ibn Abbas. Un profeta árabe que trajo el islam a estas tierras que, según cuentan, fue decapitado y, milagrosamente, consiguió sostener su propia cabeza con sus mismas manos. Su mausoleo es el templo más antiguo de Samarcanda.
Ruinas de Afrasiab
La cuarta etapa de nuestra expedición, a través de los sitios históricos de la ciudad, nos lleva a conocer el conjunto arqueológico de Afrasiab. Aquí, aparte de ver los restos de la antigua ciudad de Samarcanda, podemos visitar el Museo e incluso la tumba del Profeta Daniel, del Antiguo Testamento. El cuerpo del profeta se encuentra en el interior de un sarcófago de 18 metros de largo pues, según dicen, crece una pulgada cada año. ¿Te imaginas?
Observatorio Ulugh Beg
Estamos ahora ante la etapa final de nuestra gira por la «Ciudad de Piedra» para entrar en lo que queda, lamentablemente, de uno de los observatorios astronómicos más grandes jamás construido. El Observatorio de Ulugh Beg tenía tres pisos de altura y data del s. XV.
Espero que esta ruta te haya gustado. ¿Te animas también a descubrir las Murallas de Dubrovnik?
Imágenes: Sebastià Giralt, Loïc Brohard, escandio, Arian Zwegers, Milkseb