La Catedral de Milán, también conocida como el Duomo de Milán, es una obra arquitectónica impresionante que ha cautivado a visitantes de todo el mundo. Situada en el corazón de la ciudad, esta majestuosa catedral es un símbolo icónico de la arquitectura gótica y una joya del patrimonio cultural italiano. En este artículo, exploraremos la historia, la arquitectura, el interior y la terraza de la Catedral de Milán, junto con algunas curiosidades y consejos para visitar este magnífico lugar. ¡Acompáñanos en El Viajero Feliz!
Índice de Contenido
Historia de la Catedral de Milán
Este maravilloso templo gótico se comenzó a construir en Milán en el año 1386, pero las obras sufrieron todo tipo de avatares que hicieron que los trabajos no finalizarán completamente hasta cinco siglos más tarde. Esta es la razón de que además del gótico se puedan observar en el edificio otros estilos posteriores. El resultado final, desde luego, es impresionante.
Esta notable estructura tomó varios siglos en completarse y fue concebida por numerosos arquitectos a lo largo de los años. Sin embargo, se atribuye al arquitecto principal, Francesco Pecorari, la culminación de la obra maestra en el siglo XIX. Durante su construcción, la catedral fue testigo de diversos cambios en su diseño y técnicas arquitectónicas, lo que le confiere un carácter único. Desde entonces, la Catedral de Milán ha sido un punto de referencia histórico y religioso para la ciudad y sus visitantes.
Arquitectura de la Catedral de Milán
Imponente, majestuosa, pero ante todo bellísima. La catedral del Milán, el Duomo, es de esos edificios que dejan sin palabras cuando uno se encuentra a sus pies. Lo primero que impresiona son sus dimensiones, con sus 157 metros de largo y 45 metros de altura en su nave central. En su interior caben nada menos que ¡40.000 personas! Cuando se consigue abarcar todas sus dimensiones, lo que maravilla es su formidable silueta, la belleza de sus elementos constructivos y su magnífica decoración.
La Catedral de Milán estilo también destaca por su impresionante arquitectura gótica. Su diseño imponente presenta una fachada ricamente decorada con numerosas estatuas, pináculos y esculturas que representan a santos y figuras bíblicas. El mármol blanco de Candoglia, utilizado en su construcción, le confiere una apariencia elegante y luminosa.
El aspecto exterior del Duomo, simplemente, abruma. Construida en ladrillo revestido de mármol, lo primero que llama la atención es el fantástico bosque de 135 pináculos y torres que se alzan hacia el cielo, dando esa apariencia tan particular a la catedral. En el punto más alto, sobre una de las torres, destaca la hermosa figura realizada en cobre dorado de La Madonnina.
El interior de la Catedral de Milán
Tan sobrecogedora por fuera como por dentro. La catedral de Milán por dentro no deja indiferente en ningún aspecto. Inmensas columnas de mármol con figuras esculpidas sujetan las naves de la catedral. Cinco naves en cuyo interior se guardan incontables tesoros, entre ellos tres hermosos altares de Pellegrini, varios sarcófagos de insignes personajes y, muy especialmente, la estatua de San Bartolomé de Marco D´Agrate.
Una vez dentro de la Catedral de Milán, los visitantes quedan maravillados por su impresionante interior. La nave central, de gran amplitud, está decorada con hermosas vidrieras que filtran la luz del sol, creando un ambiente mágico y lleno de color. Las capillas laterales albergan valiosas obras de arte religioso, incluyendo pinturas, esculturas y retablos.
Uno de los puntos destacados del interior es el magnífico altar mayor, una pieza elaborada con mármol y adornada con esculturas y relieves detallados. Cada rincón del interior de la catedral invita a la contemplación y la admiración de la belleza artística y espiritual.
Terraza de la Catedral de Milán
Desde el suelo y desde las alturas, la majestuosidad del Duomo se puede admirar desde todos los puntos de vista que puedas imaginar. Si quieres contemplar de cerca los pináculos y esculturas que la adornan, si quieres disfrutar de unas maravillosas vistas de Milán, sube a la terraza.
Ocupa prácticamente todo el tejado y puedes llegar a ella de dos maneras: subiendo en ascensor o por las escaleras, sin duda el modo más recomendable porque te da tiempo a admirar muchos más detalles. Y cuando estés en lo alto, sitúate en el centro de la terraza y déjate llevar por la insuperable visión que te rodea, no la olvidarás fácilmente.
¿Cuántas escaleras hay para subir al Duomo de Milán?
Una de las características de la Catedral de Milán es que para llegar a la terraza, se deben subir una serie de escaleras, un total de 251 escalones. Aunque pueda parecer un desafío, el esfuerzo vale la pena. Al llegar a la terraza, se puede admirar la magnificencia de la catedral desde una perspectiva única y capturar fotografías espectaculares de Milán y sus alrededores.
¿Cuánto cuesta subir a la terraza del Duomo?
El acceso a la terraza del Duomo de Milán tiene un costo, pero la experiencia sin duda lo justifica. Los precios varían según la opción elegida, que puede incluir solo la terraza o también el acceso a otras áreas de la catedral. Generalmente, suele valer 14 euros, pero se recomienda consultar los precios actualizados antes de planificar tu visita.
Curiosidades de la Catedral de Milán
- Una de las características de la Catedral de Milán es que su construcción duró más de cinco siglos, desde 1386 hasta 1965.
- En la parte superior de la catedral, se encuentra una estatua dorada de la Virgen María, conocida como la «Madonnina».
- La catedral cuenta con una colección de más de 3.500 estatuas, muchas de las cuales están ubicadas en su fachada.
- Durante su construcción, se utilizaron más de 100 tipos diferentes de mármol para decorar la catedral. Cada uno de estos mármoles proviene de diferentes canteras de Italia, lo que le da a la catedral una rica variedad de colores y texturas.
- La catedral ha sido testigo de importantes eventos históricos, incluyendo la coronación de Napoleón Bonaparte como rey de Italia en 1805.
- La fachada de la catedral cuenta con estatuas que representan animales exóticos, como un rinoceronte y un elefante, lo cual era inusual en la arquitectura gótica de la época.
- En el interior de la catedral se encuentra el tesoro de la catedral, que alberga valiosas piezas de arte sacro, reliquias y objetos litúrgicos.
- Durante la Segunda Guerra Mundial, la catedral sufrió daños en algunos de sus vitrales debido a los bombardeos, pero estos fueron restaurados posteriormente.
Visitar la Catedral de Milán
Si planeas visitar la Catedral de Milán, es crucial tener en cuenta algunos detalles prácticos.
¿Cuánto cuesta entrar al Duomo de Milán?
El costo de entrada a la Catedral de Milán puede variar según las opciones elegidas. El precio puede incluir solo el acceso a la catedral o también la visita a la terraza y otros espacios. Los precios suelen ser:
- Catedral: 3€
- Terrazas a pie (250 escalones): 10€
- Terrazas en ascensor: 14€
- Museo e Iglesia de San Gotardo: 3€ (6€ si quieres visitar también la exposición)
Horario del Duomo de Milán
El horario de apertura del Duomo de Milán puede variar según la temporada. Se recomienda verificar los horarios actualizados antes de planificar tu visita, ya que puede haber cambios debido a eventos especiales o trabajos de mantenimiento. Los horarios suelen ser:
- Catedral: Todos los días desde las 8:00 hasta las 19:00 horas.
- Museo: De jueves a martes desde las 10:00 hasta las 18.00 horas.
- Baptisterio: Todos los días desde las 9:00 hasta las 18:00 horas.
- Área arqueológica: Todos los días desde las 8:00 hasta las 19:00 horas.
La Catedral de Milán es una maravilla arquitectónica que no te puedes perder en tu visita a la ciudad. Su historia, arquitectura, interior y terraza ofrecen una experiencia única para los amantes del arte y la cultura. Descubre la grandeza de la catedral, sube a su terraza para disfrutar de las vistas panorámicas y sumérgete en la atmósfera sagrada y mística de este lugar emblemático. ¡No dudes en comentar tus experiencias y compartir tus impresiones sobre la Catedral de Milán!