Un lugar romántico que se asoma al golfo Paraíso, con un paisaje tan bonito que parece irreal, un verdadero espectáculo visto desde el mar, emplazado en la maravillosa Riviera Italiana.
Camogli, la gema del golfo Paraíso
Camogli es un típico pueblo de pescadores y marineros, caracterizado por las construcciones en la roca, casas altas con las fachadas pintadas en colores vivos, sus techos de tejas y sus cientos de ventanas, una secuencia de líneas y colores que les ayudaba a los marineros camogliesi a reconocer fácilmente sus hogares a la distancia.
Esta pequeña perla de la provincia de Génova posee un casco antiguo lleno de callejuelas empinadas que surcan entre las casas; pero el corazón de Camogli es su pequeño puerto con los colores de los barcos que se reflejan en las cristalinas aguas.
Un gran atractivo en Camogli lo constituye la Basílica de Santa Maria Assunta, ubicada en el golfo de Paraíso, construida en el siglo XII. Destaca también el Santuario de Nuestra Señora del Boschetto, que fue construido donde se le apareció la virgen María a una pastora, según la tradición popular. También debes visitar la iglesia Milenaria del siglo XIII, dedicada al Sagrado Corazón de Jesús y la iglesia parroquial de San Roque de Camogli desde donde se aprecia una hermosa vista del Golfo Paradiso.
El Castello della Dragonara o Castel Dragone, construido en el siglo XII como sitio de avistamiento y defensa del pueblo, es un edificio orgullo de los lugareños. Después de muchos ataques y destrucciones, en el siglo XVI el castillo pasa a ser utilizado como prisión. Durante la década de los setenta del siglo XX, el edificio fue restaurado y dedicado a albergar el acuario Tirreno, precursor del moderno acuario de Génova.
Imprescindible una visita a la bahía de San Fructuoso a la que sólo puedes llegar a pie o en barca. Allí se encuentra una pequeña playa, un pueblecito en torno a la monumental Abadía de San Fructuoso de Capodimonte y la costa donde está el famoso Cristo del Abismo.
El Cristo del Abismo ( Il Cristo degli Abissi) es una estatua de bronce de Jesús de Nazareth, sumergida desde 1954 en el fondo de la bahía de San Fruttuoso a 15 metros de profundidad. La estatua, de 2,50 metros de altura, fue realizada por el escultor Guido Galletti. Las manos del Cristo, dirigidas hacia la superficie se encuentran en signo de paz. En el año 2004 fue recolocada en el agua sobre una nueva base, a una profundidad menor que la anterior.
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Imágenes: Davide Simonetti, Paolo Villa, Marco & Alessandra, vgm8383, Davide Simonetti, luigi alesi, Renato Grisa