Cuando aún no se habían desarrollado las técnicas arquitectónicas para elevar los edificios hacia el cielo para acercarse a Dios. Cuando aún quedaba mucho para ver las primeras construcciones góticas, en un rincón de Francia se consiguió lo que en aquella época debía parecer una quimera: que una iglesia rozara el cielo. Hablamos de una iglesia románica, su nombre es Saint-Michel de Aiguilhe y se construyó en un empalamiento espectacular. ¿Quieres conocerla?

Saint-Michel de Aiguilhe, rozando el cielo

Antes de hablar de la iglesia vamos a situarnos. Estamos en la región de Auvernia, una región espectacular por sus paisajes volcánicos ¡Sí, volcánicos! Cubiertos de vegetación, aún se pueden contemplar decenas de cráteres e imponentes domos. Los domos son formaciones rocosas de lava solidificada en el interior del volcán. Formaciones que han resistido la erosión y se mantienen en pie, aun cuando las laderas del volcán en el que se originaron hayan desparecido.

Saint-Michel-de-Aiguilhe

Pues bien, en lo alto de uno de esos domos se construyó un maravilloso templo, Saint-Michel de Aiguilhe. A nada menos que a 82 metros de altura. Casi, casi, rozando el cielo y es que estamos hablando del siglo X, una época en la que las técnicas constructivas eran aún bastante rudimentarias, de modo que alzar el templo en lo alto de la aguja volcánica debió de ser todo un reto.

Aunque lo cierto es que ya mucho antes este fue lugar sagrado. Así se cree al menos por tres enormes rocas que forman parte de la iglesia y que podrían ser dólmenes. Y también porque parece que en este mismo lugar hubo un templo romano.

Saint-Michel-de-Aiguilhe

Pero lo que ha llegado a nuestros días es una preciosa iglesia de estilo románico a la que no es demasiado complicado acceder. Siempre y cuando se tenga suficiente forma física como para subir los 268 escalones que hay hasta la cima, claro. Pero si se consigue, cualquier esfuerzo se da por bueno. Por las fantásticas vistas y por la pequeña joya arquitectónica que es el templo.

Un templo construido en el siglo X por orden del obispo de Puy-en-Velay, en un momento en el que las peregrinaciones a Santiago de Compostela comenzaban a tener cierta importancia. De hecho, el obispo Gotelasco había viajado a la ciudad gallega y fue el creador de una de las rutas jacobeas. De esta manera, Saint-Michel de Aiguilhe está íntimamente relacionada con el Camino de Santiago.

Saint-Michel-de-Aiguilhe

¿Pero cómo es la iglesia? Pequeña pero encantadora, destaca por su estilo mozárabe y por su hermosa decoración. Hay que tener en cuenta que se construyó con la propia piedra volcánica del lugar. Una piedra muy fácil de tallar. Es lo que explica la presencia de bellos arcos lobulados, filigranas y figuras ornamentales. Eso en el exterior, porque en el interior lo que se descubren son bellos mosaicos, frescos y policromías. Una auténtica maravilla.

Una iglesia espectacular en un enclave único, como lo son sus alrededores, entre los que destaca la medieval localidad de Le-Puy-en-Velay, que por supuesto debes visitar. ¿Quieres más sugerencias? Entonces no te pierdas el Parque de los Volcanes de Auvernia o la ciudad de Lyon. Hay algunos kilómetros de distancia, pero merece la pena desviarse.

Imágenes: Brigitte DjajasasmitaHolly HayesPanoramas.