La capital de Eslovenia, Liubliana, tiene el sabor de ciudades como Praga, Ámsterdam, Riga, Viena, Graz o Salzburgo. Esta desconocida joya se alza al pie de los Alpes eslovenos y posee varios elementos que la hacen realmente atractiva.
Liubliana no es una ciudad demasiado grande y eso la convierte en un lugar fácil de visitar. Muchos de sus atractivos se encuentran en el casco antiguo, al que se puede acceder a pie. No es extraño que, a simple vista, Liubliana pueda recordar a alguna otra ciudad europea pero, una visión más profunda puede convertirla en única, maravillosa e inolvidable. ¿Te vienes conmigo?
El castillo
En la colina más alta de la ciudad se alza el Castillo de Liubliana, símbolo de Liubliana. Desde esta fortaleza se obtienen las mejores vistas de toda la capital: el casco antiguo, las tejas rojas de las casas, el río Ljubljanica, los parques que consiguieron convertirla en la Capital Verde en el 2006, las iglesias de Saint Florian y Saint Jakob,… Desde aquí pueden saborearse esas conexiones con Austria y algunas ciudades del centro de Europa.
Puente de los dragones
Este emblemático puente fue construido a principios del siglo XX con un estilo Art Nouveau. En el momento en que cuatro dragones tuvieron el honor de custodiarlo, éste se convirtió en el puente más importante de la ciudad.
Existen varias leyendas en Liubliana relacionadas con el dragón, símbolo de la ciudad, y una de ellas asegura que cada vez que una virgen cruza el puente, los dragones mueven sus colas.
Las plazas más bonitas
La Plaza Prešeren está situada en el mismísimo corazón histórico de Liubliana. Esta hermosa plaza fue construida en honor a un poeta esloveno, France Preseren, y es ideal para pasear. Sin embargo, la Plaza Municipal (Mestni trg), la Plaza Vieja (Stari trg) y la Plaza Superior (Gornji trg) no se quedan atrás porque se han convertido en los lugares más carismáticos de la ciudad y en ellas pueden encontrarse numerosos restaurantes y cafeterías, siempre rodeados de impresionantes edificios barrocos y medievales.
Un paseo inolvidable
Paseando es la mejor forma de conocer esta pintoresca y bonita ciudad. El ambiente de los cafés, los colores, las fuentes,… Todo.
El puente triple, conocido como Tromostovje, fue diseñado por el arquitecto más famoso de Liubliana, Jože Plečnik. A un lado de este puente se encuentra la Plaza Presernov, presidida por la iglesia de la Anunciación y cuyo altar de estilo barroco es una auténtica obra de arte.
En la otra orilla se encuentra el Ayuntamiento, la Catedral de San Nicolás, el Palacio del Seminario y el Mercado Central, lugar en el que cada noche los mejores chefs preparan sus exquisitos platos.
Liubliana es, en definitiva, una joya escondida y poco conocida pero no por eso menos preciosa.
Fotografías: milenamphoto, Elvira S. Uzábal – elbeewa, Jorge Cancela, Toni Corretge, C K Leung