La Mezquita Hassan II, diseñada por el arquitecto francés Michel Pinseau, se encuentra en la ciudad de Casablanca, en Marruecos, y es el templo más alto del mundo y el segundo más grande después de La Meca. Una característica que lo hace ser el foco de todas las miradas. ¿Será también de la tuya? ¿Quieres conocerla? ¡Vamos allá!
Hassan II, el templo más alto del mundo
El 30 de agosto de 1993, después de 8 años de duro trabajo, se inauguraba el templo que sería el más alto del mundo. Su construcción obtuvo bastantes críticas debido a su elevado coste y a la supuesta demolición de algunas viviendas que se encontraban dentro del terreno que ocuparía el templo. Sin embargo, el rey Hassan II consideró que Casablanca, como capital, disponía de suficiente poder económico como para poseer algo que la distinguiera del resto de poblaciones del país. El templo está situado sobre una península artificial sobre el agua del océano porque Hassan II quería basarse en el versículo coránico que decía que «el trono de Alá se hallaba sobre el agua». Increíble, ¿verdad?
Además de ser el templo más alto del mundo, con una capacidad de hasta 100.000 personas y con unos 30.000 metros cuadrados, también posee las últimas novedades tecnológicas: resistencia a terremotos, techo de apertura automática, calefacción, puertas eléctricas… ¡De todo!
Este templo hace de mezquita los viernes y dispone de una madrasa (escuela religiosa), salas de conferencias, hammams (baños árabes), bibliotecas especializadas y un aparcamiento subterráneo.
La grandiosidad convierte a la Mezquita Hassan II en uno de los lugares más bonitos de la ciudad de Casablanca. Todos los visitantes, sean creyentes o no, se sienten pequeños ante la grandeza y majestuosidad del templo, considerado una joya marroquí por el trabajo de más de 10.000 personas y los exquisitos materiales que fueron utilizados en su construcción. ¡Quedarás impresionado!
Este templo fue construido para convertirse en una zona de paz, descanso y cultura, dejando de lado la exclusividad del rezo. Además, es una de las pocas mezquitas en la que se permite la entrada de los no musulmanes. Una opción que, sin duda, atrae a muchas más personas. ¿Aún estás pensando en si visitarlo o no?
Después de un agradable paseo por los alrededores de la Mezquita Hassan II y tras descubrir su impresionante interior. ¿Qué te parece una parada en el Rick’s café?
Fotografías: Evgeni Zotov, Patrick JACOB, Christopher Michel, Never House, Claudia Ledda,