La pizza en Italia, el fish & chips en Inglaterra, la paella en España, el sushi en Japón, pero… ¿y en Rumanía? Los platos típicos de este país no son tan conocidos aunque pueden ser tanto o más ricos que los anteriores y, con algunos de ellos, se puede disfrutar bastante. ¿Te atreves a conocerlos para después probarlos? ¡Vamos a ello!
Gastronomía rumana, ¡descúbrela!
La gastronomía rumana se caracteriza por ser muy variada y tiene unas claras influencias de la cocina balcánica, alemana, serbia y húngara. Sin embargo, hay una serie de platos que la definen y que vale la pena conocer. Uno de ellos es la ciorba o sopa agria que puede hacerse de diferente manera: de legume, sería una sopa de verduras con bastantes vegetales; de perisoare, con albóndigas y dos o tres bolitas de ternera; de bruta, ideal para los más atrevidos porque su ingrediente principal son las tripas.
Otro plato muy típico es la tocanita, un estofado de carne de pollo o ternera que puede ir acompañado de algunos complementos, como patatas. Algo que define muy bien a la cocina rumana es la carne, su sabor es muy apreciado y pueden comerse todo tipo de carnes a la brasa, incluso la de oso. El sarmale, otro plato muy común del país, también lleva carne, pero esta vez enrollada con hojas de col o repollo y acompañada de cebolla y otras verduras. Quizá su aspecto no resulte muy atractivo, pero su sabor es exquisito y nadie debería irse de Rumanía sin haber probado este plato tan típico.
Para aquellos que no sean muy amantes de la carne tienen a su disposición la saramura de crap, carpa a la parrilla en la salmuera; o el nisetru la gratar, esturión a la parrilla.
La bebida tradicional es solo apta para aquellos que tengan un estómago fuerte. Tuica, que así se llama este licor, es una especie de orujo que ayuda a soportar las bajas temperaturas invernales. Para aquellos que prefieran algo más suave, por la zona de Prahova se hacen unos vinos excelentes y la Timisoreana es su cerveza más típica.
Y para endulzar el viaje, nada mejor que un delicioso cozonac, parecido a un panettone; o una placinta, una especie de hojaldre emborrachado.
Entonces… ¿qué tal si nos pasamos por Rumanía y probamos sus platos?
Fotografías: Santi Villamarín, Dobrin Isabela, meaduva, slavulete ovidiu