El Palacio de Pena es quizás una de las imágenes más emblemáticas y conocidas de Portugal. En lo alto de una colina por encima de la romántica ciudad de Sintra, el Palacio de Pena se puede ver desde lugares tan lejanos como la capital de Portugal, Lisboa, en un día claro.
La Historia
Se trata de un monumento nacional protegido y considerado como uno de los mejores ejemplos del mundo de la arquitectura romántica del siglo XIX.
Construido unos treinta años antes de que el Schloss Neuschwanstein, en Baviera, se ha reconocido como una de las Siete Maravillas de Portugal y ha ganado una designación como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este es un destino de visita obligada en el itinerario de vuestra visita a Portugal.
El Palacio de Pena se remonta a la Edad Media. Fue adoptado como un destino de peregrinación y como santuario por los gobernantes portugueses en el siglo XV, primero por el rey Juan II y más tarde por el rey Manuel I, quien tenía un monasterio construido en el sitio, aunque tristemente quedo en ruinas en el devastador terremoto de 1755.
Diseño y arquitectura
El palacio se convirtió en el refugio favorito de varias generaciones de la familia real portuguesa, que escapaban a las frescas colinas de Sintra cada año durante los meses de verano.
Después de la revolución republicana de 1910, el Palacio de Pena fue abierto al público como museo nacional y no es sorprendente que rápidamente se convirtiese en uno de los monumentos más visitados del país.
Es la combinación seductora de su historia, el patrimonio arquitectónico, los colores arena y pastel del exterior y su posición majestuosa, que emergen de la exuberante vegetación y se elevan sobre la ciudad y las colinas de Sintra, los que hacen del palacio, un destino imprescindible .
Perderse en la exuberante vegetación
Dentro de sus paredes y suelos, los visitantes del palacio pueden deleitarse caminando por el paisaje verde y ajardinado, un laberinto de puentes, grutas, pérgolas y fuentes salpicadas por la visión embriagadora y los aromas de miles de plantas floreciendo. Amplias vistas se abren camino a través del panorama de 200 hectáreas del Pena Park, hogar de la más variada y única combinación de especies de árboles en el continente europeo.
Si estáis haciendo turismo a lo largo y ancho de Portugal, visitando Lisboa o de vacaciones en las hermosas playas de arena de la costa de Estoril, no os perdáis la oportunidad de visitar el Palacio de Pena, uno de los monumentos más emblemáticos y fotografiados del país.
Si quieres seguir visitando el país no te pierdas estupendos destinos como Óbidos u Oporto.
Imagen: www.GlynLowe.com, Clark & Kim Kays, LisArt, Jedidiah Gordon-Moran, Geerd-Olaf Freyer y Sagrario Gallego vía Flickr