Francia es un país donde no es complicado toparse en el camino con maravillosos pueblos de ambiente medieval. Uno de esos pueblos es Estaign, en el departamento de Aveyron, un lugar donde es fácil retroceder en el tiempo mientras se pasea por sus callejuelas o se admira su castillo ¿Te apetece acompañarnos en un paseo por esta bella localidad? Entonces acompáñanos, te va a encantar.
Estaign, un bonito pueblo medieval en Francia
Ya antes de entrar en Estaign te tropiezas con una construcción maravillosa: el puente gótico, con sus cuatro arcos ojivales sobre el río Lot. Una infraestructura declarada Patrimonio de la Humanidad al formar parte del Camino de Santiago. Por aquí pasan los peregrinos que se dirigen a Galicia y seguro que no pueden evitar posar su mirada en la fantástica cruz de hierro forjado que lo adorna y que es el símbolo de la región de Aveyron.
Cruzamos el puente y nos adentramos en uno de los pueblos más bonitos de Francia. Y no lo decimos nosotros, sino que Estaign forma parte de un selecto grupo de localidades galardonadas con esta distinción. Comienza un paseo inolvidable entre casas y edificios con increíbles fachadas de los siglos XVI al XVIII coronados por tejados negros de pizarra. Destacan entre ellos la escuela de St. Fleuret o el palacete Cayron, hoy ayuntamiento.
Pero vamos a hacer mención especial a dos de los tesoros de Estaign. El primero de ellos es la iglesia, un templo construido en el siglo XV que guarda las reliquias de Saint Fleuret. Merece la pena dedicar unos minutos admirar sus bonitas vidrieras y sus retablos. A sus pies encontramos una cripta con tres capillas y justo enfrente unas tumbas del siglo XI que nos recuerdan que aquí hubo un cementerio. También hay que fijarse en la cruz de piedra que hay en el centro de la plaza y que recuerda que este es paso del Camino de Santiago.
Y así llegamos, por fin, al orgullo de Estaign: su fantástico castillo. Un castillo construido en el siglo XIII alrededor de un torreón de forma pentagonal que existía en el lugar con anterioridad. En lo alto, 5 torres y una terraza desde la que se observan unas vistas impresionantes. Fue propiedad de la familia Estaign durante 8 siglos y hoy lo es de la Fundación Válery Giscard d’Estaign, sí, del expresidente de la República Francesa. Por cierto, solo se puede visitar entre mayo y octubre.
Y no podemos abandonar esta bella localidad sin hacer referencia a sus viñedos, y es que Estaign está situado en un valle donde las temperaturas son más que propicias para el cultivo de la vid. De hecho, sus vinos tienen denominación de origen. Si quieres conocer a fondo todo lo relacionado con ello, te recomendamos visitar la “Casa de la Viña, del Vino y de los Paisajes de Estaign”.
Si te has animado a visitar Estaing, una recomendación, si puedes, hazlo en el mes de septiembre. Durante el segundo fin de semana la villa retrocede completamente en el tiempo gracias a sus fiestas medievales. En ellas doncellas, trovadores y caballeros se apoderan de las calles de la localidad.
¿Te has quedado con ganas de más? En ese caso, viaja con nosotros a la maravillosa Bretaña, te enamorarás de ella.
Imágenes: stibou5, Bernard Niess.