La catedral de San Patricio en Dublín, también conocida como St. Patrick’s Cathedral, se yergue triunfal en la bella ciudad irlandesa. Recorrer los sitios imprescindibles de Dublín y no conocer este rincón es como si no hubieras estado en la ciudad. Hoy en El Viajero Feliz traemos esta propuesta para quienes quieran conocer una de las dos catedrales que pertenecen a la Iglesia de Irlanda y la más grande de ellas. ¡Acompáñanos!

Índice de Contenido

Historia de la catedral de San Patricio en Dublín

catedral-de-san-patricio-exterior

Según cuenta la leyenda, San Patricio, el patrón de la capital irlandesa, fue quién bautizó a los primeros conversos en Irlanda, es decir, a los paganos que se querían convertir a la religión cristiana. Lo hacía sumergiéndoles en el agua del pozo al lado de la catedral, razón por la cual esta edificación religiosa se construyó en su emplazamiento actual.

Originalmente, la hoy catedral fue un templo edificado en madera en el siglo V. Posteriormente, los normandos construyeron la iglesia en piedra, pero no fue sino hasta el 1200 cuando se comenzó a edificar la construcción actual. Se concluyó en 1970.

Y aunque ha sufrido varias renovaciones con el pasar del tiempo, por ejemplo, la reconstrucción de la torre occidental que fue devastada en un incendio o la incorporación de la agua de la torre en 1749, la esencia de la iglesia se ha mantenido en cada una de ellas. Gacias a la donación de Sir Benjamin Guinness se devolvió la vida a esta catedral que sufrió altibajos a lo largo de su densa historia de 1500 años. Hoy es orgullo y un símbolo del país.

La bella catedral de San Patricio

interior-de-la-catedral

La catedral de San Patricio en Dublín es de estilo gótico y su espléndido campanario es visible desde varios puntos de Dublín. En sus jardines exteriores no es extraño ver a viajeros descansando, dado que es un lugar agradable, alejado del bullicio de la ciudad e ideal para los turistas cansados.

Pero si su exterior es deslumbrante, su interior no lo es menos. Dentro respirarás historia por doquier. En su interior encontrarás infinidad de bustos, placas mortuorias y monumentos sepulcrales realizados en conmemoración de los ciudadanos irlandeses más célebres. Los restos de Jonathan Swift, conocido por escribir Los viajes de Gulliver, yacen en la catedral de San Patricio en Irlanda.

Observa también la pila bautismal, que se conserva en perfectas condiciones desde su creación en el Medievo. Y no te olvides de la Puerta del Capítulo. Se trata de una curiosa puerta que tiene un agujero. Se dice que en ese agujero metieron su mano los condes de Kildare y Ormonde para zanjar, de esta forma, su enemistad en el siglo XV.

Dónde se ubica la catedral de San Patricio

exterior-de-la-catedral

La dirección de la catedral de San Patricio en Dublín es: St Patrick’s Close, Dublin 8, A96 P599, Irlanda. Para llegar a ella puedes tomar las rutas de autobús: Patrick St. (Dean St.), líneas 49, 49A, 54A, 77A y 150.

Como dato interesante te contamos que a pocos metros de la catedral de San Patricio se encuentra la Christ Church Cathedral, la otra catedral medieval de la ciudad. Así que puedes aprovechar y disfrutar la visita de ambos templos religiosos.

Horario y precios

catedral-de-san-patricio-interior

Si se quiere tener acceso, se ha de saber que los horarios de la catedral de San Patricio varían a lo largo del año. La catedral de San Patricio en Dublín abre durante los meses de marzo a octubre de 9:00 a 17:30 horas de lunes a viernes; el sábado de 9:00 a 18:00 horas y el domingo de de 9:00 a 10:30, de 12:30 a 14:30 y de 16:30 a 18:00 horas. En los meses de noviembre a febrero sus horarios son de lunes a sábado de 9:30 a 17:00 horas y los domingos de 9:00 a 10:30 y de 12:30 a 14:30 horas.  ¡Advertencia! Ten en cuenta esto porque durante las misas no permiten visitas.

El precio de entrada para los adultos es de 8 € y para los estudiantes es 7 €. No obstante, tienes entrada gratuita con la Dublín Pass.

No dudes en conocer esta catedral y en dejarnos tus comentarios acerca de la experiencia. Por supuesto, si te ha gustado este artículo, ¡comparte!

Si quieres conocer Dublín, entonces tampoco te pierdas: